Un segundo tsunami sanitario ya pone a prueba a Europa. El continente observa cómo semana a semana la pandemia de Covid-19 avanza imparable por su territorio con cifras de contagio que han empezado incluso a batir récords en algunos países. Dar respuesta a este reto es la tarea en la que se afanan la mayoría de los gobiernos del viejo continente, que optan estos días por endurecer las restricciones que ya imponen a sus ciudadanos y que pasan por limitar al máximo la movilidad, clausurar centros escolares y de ocio o incidir en la obligatoriedad de emplear elementos de protección personal como las mascarillas.

Francia. El Gobierno de Francia decidió ayer decretar de nuevo el estado de emergencia sanitaria en el país desde la medianoche de este sábado, una decisión tomada debido al agravamiento de la pandemia de coronavirus. De forma paralela, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, confirmó la imposición de un toque de queda que durará al menos cuatro semanas desde este sábado en París, Marsella-Aix en Provence, Lyon, Lille, Grenoble, Montpellier, Toulouse, Rouen y Saint Etienne. El toque de queda será de 21.00 a 6.00 horas y solo estarán excluidos de cumplirlo las personas que regresen de trabajar más tarde de las nueve de la noche y quienes experimenten una emergencia sanitaria. Se establecen multas que van de 135 euros a 1.500. La agencia de salud pública que depende del Ministerio de Sanidad anunció ayer 12.993 nuevos contagios en 24 horas y 87 muertos.

Alemania. Con 5.132 nuevos contagios de coronavirus, el nivel más alto desde el mes de abril según los registros del Instituto Robert Koch (RKI), el Gobierno de la canciller Angela Merkel acordó ayer con los poderes regionales un sistema de "alerta temprana" a escala territorial para tratar de contener el aumento de contagios en el país, en un intento por evitar un nuevo cierre de la vida pública. A partir del umbral de 35 nuevos contagios registrados por cada 100.000 habitantes y en un período de 7 días se extenderá el uso obligatorio de la mascarilla, aunque con 50 se cerrará la vida nocturna a las 23.00 horas y se prohibirán los encuentros, inclusive privados, de más de diez personas. Actualmente hay más de treinta distritos o ciudades clasificadas como zona de riesgo -incluido Berlín, Múnich y otros núcleos urbanos-.

Reino Unido. El Ministerio de Sanidad británico notificó ayer un total de 19.724 nuevos contagios, el segundo peor dato de toda la pandemia en una jornada en la que el país estrenó ayer el paquete de medidas anunciado el lunes en el Parlamento por el primer ministro, Boris Johnson. Su territorio queda ahora dividido en zonas de incidencia que se catalogan en tres intensidades, obligando a los territorios más castigados, como Liverpool, al cierre de bares y pubs y con la prohibición de que interactúen personas de diferentes hogares en interiores. Por su parte, Irlanda del Norte anunció ayer el cierre de los colegios y los bares.

Italia. El Gobierno de Giuseppe Conte, que ordena por decreto gracias al estado de emergencia extendido hasta el 31 de enero de 2021, ha adoptado medidas como la imposición de la mascarilla siempre, el cierre anticipado de bares y restaurantes o la prohibición de partidos de deportes de contacto entre amigos, así como celebrar fiestas privadas, entre otras. Italia comunicó ayer 7.332 nuevos contagios por coronavirus.

República Checa. La República Checa notificaba ayer un total de 8.325 nuevos casos de Covid-19, en 24 horas, la segunda cifra más alta desde el estallido de la pandemia, en una jornada en la que entró en vigor el cierre de colegios (a excepción de las guarderías, bares y restaurantes durante dos semanas. El Ministerio de Sanidad informó de que hay actualmente 68.740 contagios activos en el país, que reporta 524 casos acumulados en los últimos catorce días por 100.000 habitantes, la cifra más alta de la Unión Europea. Las autoridades han requerido a los estudiantes universitarios a que abandonen los campus y la obligación usar mascarilla se ha extendido a todas las paradas de transporte público. Además, se ha prohibido el consumo de alcohol en espacios públicos y se ha limitado a seis el número de personas que pueden reunirse en interiores.