Un millar de muertes naturales, 525 casos de asma infantil y 110 cánceres de pulmón el año pasado en Barcelona son resultado de que en 2019 la contaminación en el aire de la ciudad superase los límites fijados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Estas cifras son algunas de las que recoge el Informe de calidad del aire de Barcelona de 2019 han presentado este lunes la concejal de Salud y presidenta de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), Gemma Tarafa; y la directora de Salud Ambiental de la ASPB, Elisenda Realp.

Según el último informe sobre la exposición de la población a la contaminación del aire y su impacto en la salud de los barceloneses, que elabora anualmente la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), el exceso de contaminación provoca el 7% de las muertes naturales en Barcelona, un porcentaje que sube al 23% en el caso del Eixample, el distrito con peor calidad del aire y más densamente poblado de la ciudad.

El informe señala que sobrepasar las recomendaciones de la OMS provoca 1 de cada 3 nuevos casos de asma infantil y 1 de cada 9 casos de cáncer de pulmón en Barcelona. También estima que 1 de cada 4 escuelas de la ciudad está expuesta a niveles de NO2 por encima del límite legal (40 mg/m3), sobre todo en el distrito del Eixample

"Todos los datos nos llevan a decir que la contaminación es el primer problema de salud pública que tenemos en la ciudad y que hay que trabajar para revertirlo", ha advertido la concejal Tarafa.

En este sentido, Gemma Tarafa ha señalado que este informe no cuantifica aún el impacto de las intervenciones que se han llevado a cabo este año 2020 para rebajar los niveles de NO2 y micropartículas PM2,5 en el aire de Barcelona, cuyos efectos se reflejaran en el próximo estudio.

Entre ellas, ha destacado la Zona de Bajas Emisiones Rondas, la protección de las escuelas, el refuerzo del transporte público y las supermanzanas y el cierre al trafico de algunas calles importantes el fin de semana.

La directora de Salud Ambiental de la ASPB, Elisenda Realp, que ha presentado el informe, ha explicado que el 35% de la población de la ciudad está expuesta a niveles de NO2 por encima del límite legal, mientras que el 100% de la ciudadanía lo está a niveles de PM2 cinco veces por encima del valor guía de la OMS.

Como la exposición al NO2 va muy ligada al tráfico y tiende a aumentar en barrios donde viven personas con nivel socioeconómico favorecido, el informe concluye que el Eixample es el distrito más afectado, con el 94% de sus vecinos expuestos a niveles por encima del límite legal.

Realp ha reclamado "apostar fuertemente por la reducción del trafico", tanto en las políticas publicas como en los hábitos personales. En el mismo sentido se ha pronunciado el investigador del ISGlobal Jordi Sunyer, que también ha intervenido en la presentación y que ha apremiado a intervenir contundentemente en movilidad y urbanismo.

"Lo que nos dice este informe es que es urgente a corto plazo hacer intervenciones para reducir la carga de mortalidad y morbilidad", ha señalado Sunyer.

Ha señalado que Barcelona es la ciudad con más densidad de tráfico de Europa, con 6.000 coches por metro cuadrado, y se requieren sacrificios para que haya menos y no quedarse en el siglo XX.

Para Sunyer, que el exceso de contaminación del aire cause un 7% de las muertes anuales en la ciudad "es una cifra astronómica" y que suponga el 20% de la mortalidad de los vecinos del Eixample, "estratosférica".