La futura ley de educación incorporará una nueva modalidad de bachillerato. Ahora mismo hay tres tipos: Humanidades y Ciencias Sociales, Artes y Ciencias (disciplina esta última a la que se añadirá Tecnología). Una vez que la nueva Lomloe (ley orgánica de mejora de la LOE) entre en vigor habrá un cuarto tipo: el bachillerato general, en el que los estudiantes podrán recibir contenidos combinados de los tres modelos ya vigentes.

La nueva opción pretende retener en los centros educativos a aquellos alumnos y alumnas que aún no tienen clara la trayectoria de especialización. El objetivo es seducirles para que continúen estudiando superando la tradicional dualidad entre las ciencias y las letras. Al igual que las otras tres opciones, el bachillerato general dará acceso a la formación de grado superior, universidad incluida.

Uno de los objetivos que persigue con más ahínco el Ministerio de Educación, y en particular la creación de esta nueva modalidad de bachillerato, es combatir el abandono escolar temprano en España: que se sitúa en el 17% frente al 10% europeo. Aunque el bachillerato no forma parte de la educación obligatoria por ley (que abarca desde los 6 hasta los 16 años), el departamento que dirige Isabel Celaá quiere que el 90% de los alumnos que se gradúan en secundaria continúen formándose en los ciclos posobligatorios.

Con la meta de seducir a más alumnos, la Lomloe permitirá realizar los estudios de Bachillerato -sea la modalidad que sea- en tres años en lugar de los dos actuales. Uno de sus artículos especifica que el Gobierno, previa consulta a las comunidades autónomas, "fijará las condiciones en las que el alumnado pueda realizar el Bachillerato en tres cursos en régimen ordinario, siempre que sus circunstancias personales, permanentes o transitorias, lo aconsejen" . En este caso, las autoridades educativas contemplarán la posibilidad de que el estudiante curse simultáneamente materias de ambos cursos.

El nuevo tipo de bachillerato se acaba de incorporar al texto legislativo tras una enmienda de ERC, aceptada por el PSOE y Unidas Podemos.

La Lomloe (que sustituirá a la polémica Lomce, conocida como ley Wert por el apellido del entonces ministro del PP) todavía se está cocinando en el Congreso de los Diputados. Una vez que la ponencia termine su trabajo (se han recibido más de 1.100 enmiendas), la norma pasará al Senado e irá de vuelta a la cámara baja donde será ratificada definitivamente.

Por otra parte, la Fiscalía del Tribunal Supremo está investigando el acuerdo adoptado por la Conferencia Sectorial de Educación del pasado abril que permitía pasar de curso con suspensos, y ha solicitado al ministerio que dirige Isabel Celaá el expediente administrativo vinculado a dicha decisión.

El Ministerio fiscal ha abierto diligencias de investigación a raíz de la denuncia de un particular contra la ministra de Educación, donde se ponía de manifiesto que dicha decisión podría haber constituido un presunto delito de prevaricación.

El denunciante considera que el acuerdo podría haberse adoptado por un órgano que no tenía competencias para ello, la citada conferencia sectorial de Educación.