Dinamarca, primer productor mundial de piel de visón, exterminará a 17 millones de estos animales tras haber hallado en ellos una mutación del virus resistente a anticuerpos. Parece el argumento de una película de serie B, pero la Organización Mundial (OMS), se lo ha tomado muy en serio. "Estamos al tanto de las informaciones desde Dinamarca sobre varias personas infectadas con coronavirus de visones, con algunos cambios genéticos en el virus", tuiteó ayer la OMS.

La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, anunció que todos los visones del país, pertenecientes a más de un millar de granjas, serán sacrificados por precaución y por responsabilidad hacia los daneses y al resto de la población mundial. Frederiksen dijo que el Gobierno danés posee información que apuntan a que ese SARS-CoV-2 mutado debilita la capacidad del cuerpo humano para crear anticuerpos, lo que podría poner en entredicho la efectividad de las vacunas que actualmente se desarrollan contra el Covid-19, según confirmaron el epidemiólogo Kåre Mølbak, jefe del Statens Serum Institut de Copenhage, y el ministro de Salud danés, Magnus Heunicke, quien afirmó que se trata de "una amenaza para el desarrollo de vacunas".

Doce personas de la región de Jutlandia han contraído este virus mutado y muestran una reacción débil a los anticuerpos, según informó The New York Times.

Científicos consultados por este periódico estadounidenses pidieron más información sobre esta variante para evaluar el problema. La científica, especializada en análisis genéticos en la Universidad de Basilea (Suiza), señaló que el hecho de que esta cepa confiera algún nivel de resistencia a un anticuerpo no es necesariamente lo mismo que influir en la eficacia de una vacuna. Esta investigadora consultó un informe publicado el 16 de septiembre por el Statens Serum Institut de Copenhage, que identificó dos variantes, la N439K y la A22920T, que solo se ha hallado en visones. Ambas mutaciones afectan a la proteína spike (espícula), que utiliza el virus para entrar en la célula y sobre la que actúan los anticuerpos.

La Consellería de Medio Rural de la Xunta ha estrechado los controles sobre las 31 granjas de visones de Galicia, que suponen el 84% de las que operan en España. El 16 de julio, Sanidad ordenó sacrificar los 92.700 visones de una granja de Teruel invadida por el nuevo coronavirus.

Se han detectado infecciones en visones en 12 países, y ha habido sacrificios masivos en Países Bajos, Estados Unidos, Italia y la propia Dinamarca, donde las autoridades ya anunciaron el 2 de octubre que exterminarían a un millón de ejemplares. Un estudio neerlandés apuntaba a la posible transmisión de visones a humanos, que parece confirmarse ahora.

La ONG conservacionista WWF volvió ayer al Gobierno al Gobierno español "el cierre inmediato de las granjas de visón americano, reservorios del coronavirus".

Fernando Simón señaló que desconoce si esta mutación es "diferencial", por transmisibilidad o virulencia, y auguró que "es muy posible que se quede en un tema local, porque los visones se sacrificarán".

Por su parte, el investigador del CSIC Antonio Figueras, experto en virus en animales, comentó a LA OPINIÓN que "ahora más que nunca, el concepto de salud global, one health, es necesario. Tanto para situaciones como esta pandemia como para los problemas de medio ambiente que tienen repercusiones sobre nuestra salud de forma directa e indirecta: plásticos".