Es la principal causa de muerte infecciosa en el mundo -solo en España cada año fallecen más de 10.000 personas por neumonía- y se prevé que el número de víctimas pueda aumentar hasta un 75% este año debido al Covid-19, virus que favorece la aparición de esta enfermedad en los pulmones. Por ello, ya que está presente en la gran mayoría de pacientes ingresados con coronavirus, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) acaba de iniciar un estudio a nivel estatal -en el que participan varios centros gallegos, entre ellos el Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña- con el que se busca crear la primera escala pronóstica para la neumonía en estos pacientes y, de este modo, "poder predecir cuando haya un ingreso las posibilidades de que ese paciente empeore o de que llegue a fallecer", indica la neumóloga Rosario Menéndez, coordinadora de este estudio en el que se espera llegar a analizar a 4.000 pacientes de todo el país.

La neumonía, cuyo día mundial se conmemoró ayer, es una enfermedad que produce la inflamación de los pulmones y que puede estar causada por una bacteria o por un virus como el de la gripe o ahora el coronavirus. Pese a ser una patología ya conocida antes de la pandemia -desde Separ calculan que cada año 100.000 personas ingresan en España por esta razón-, quienes la sufren a causa del Covid presentan ciertas características específicas. "Si en la neumonía clásica prepandemia los síntomas más habituales eran fiebre, tos con esputos amarillos y dolor torácico, en los pacientes con Covid vemos que no hay tanta presencia de dolor torácico y aparecen otros síntomas como pérdida del olfato o el gusto", indica la neumóloga Menéndez, quien señala que también hay diferencias "tanto en la expresión radiográfica, ya que se parece más a las neumonías causadas por un virus que a la bacteriana, como en las analíticas".

Y tampoco la evolución del paciente es similar. Mientras para las neumonías causadas por bacterias hay antibióticos para poder atajar el problema, "con el Covid tenemos la dificultad de que no hay un tratamiento antiviral -aunque se ha probado con redemsivir pero es para pacientes específicos, explica la doctora Menéndez- y esto hace que aumente el riesgo de progresión de la enfermedad, sobre todo a partir del séptimo y noveno día desde la aparición de síntomas".

Con la experiencia acumulada estos meses de pandemia y las "pistas" que aportan analíticas, radiografías o el nivel de oxigenación en sangre "podemos ver o predecir qué tipo de neumonías tienen más posibilidades de tener mejor o peor evolución", indica Menéndez. Precisamente los resultados de esas pruebas, la edad de los pacientes así como su evolución serán algunas de las variables que se recogerán en el estudio multicentro con el fin de poder adelantarse y saber de antemano qué pacientes con neumonía por Covid tienen más riesgo de empeorar y de ingresar en UCI o incluso de fallecer. "Queremos crear una escala pronóstica, es decir, a través de un modelo matemático poder indentificar lo más rápidamente posible la gravedad del paciente", indica Menéndez, quien explica que el objetivo es que aunque se analizarán principalmente a pacientes con neumonía, poder después trasladar esta escala a otro tipo de enfermos para ver si también ayudan a predecir el riesgo de complicaciones.

"Esperamos tener una aproximación antes de final de año y ya datos confirmados en el primer trimestre de 2021", indica esta neumóloga, quien reconoce que a la hora de tener neumonía influye la edad -"hay más riesgo en los extremos de la vida como niños menores de 5 años o mayores de 65", indica esta especialista- y en su pronóstico influye también si existen o no otras patologías de base.

Aunque los expertos reconocen que hoy en día "la gran mayoría" de neumonías que se ven en consulta o en los hospitales están causadas por el Covid es conveniente siempre hacer las pruebas correspondientes para ver el origen y la tipología de infección. Desde Separ recuerdan que es posible prevenir algunos tipos de neumonía a través de la vacunación contra la gripe el neumococo, dejando el tabaco y con una correcta higiene bucal. Hay estudios que demuestran que los fumadores tienen un mayor riesgo de sufrir neumonía ya que los cigarrillos incluyen miles de sustancias tóxicas y algunas de ellas alteran los mecanismos de defensa de los pulmones, por lo que aumenta las probabilidades de sufrir una neumonía de origen bacteriana. Y los mismo ocurre si hay un déficit de higiene bucal, que eleva el riesgo de padecer esta patología.