El Tribunal Supremo ha avalado el uso obligatorio de las mascarillas impuesto por el Ministerio de Sanidad el pasado mes de mayo por tratarse de una medida "necesaria y proporcionada" para proteger la salud pública ante la progresión de la pandemia de Covid-19.

La Sala de lo Contencioso-Adinistrativo del Supremo ha desestimado el recurso de un ciudadano contra la orden del Ministerio de Sanidad 422/2020, de 19 de mayo, que reguló las condiciones del uso obligatorio de mascarilla. Esta persona alegó que esa imposición vulnera, entre otros, sus derechos fundamentales a la integridad física y moral y al honor. El Supremo ha sentenciado que la disposición de Sanidad fue "legítima" y ha argumentado que los hipotéticos riesgos que comporte el uso de la mascarilla siempre serán menores que el beneficio que proporciona como forma de prevención.

El recurrente era partidario de favorecer los contagios para desarrollar inmunidad de grupo, consideraba injustificada la declaración del estado de alarma, negaba que el sistema sanitario hubiera estado cerca del colapso y denunciaba la imposición del uso de mascarillas.

En una sentencia de la que ha sido ponente la jueza Celsa Pico, el tribunal deja claro que "en una indiscutible situación de pandemia como la generada por el Covid, que, notoriamente, no se circunscribe al territorio español, resulta evidente que debe prevalecer el interés general sobre el individual".