La foto sería la misma de hace un año sin mascarilla y sin expediente. El espíritu del Verín non se pecha tomó el hospital ourensano con la misma intensidad que durante el cierre del paritorio para luchar por archivar el expediente disciplinario que pesa sobre Javier Castrillo, jefe del servicio de Ginecología del hospital verinense, por supuestamente “desconsideración a un igual” y “no cumplir un protocolo”. La Plataforma de Verín non se pecha convocó ayer a sus vecinos para protestar por esa “revancha del gerente del área sanitaria de Ourense contra quien luchó por la dignidad del rural”.

La respuesta tuvo más de 500 voces gritando al unísono que Castrillo non se toca. Allí, el doctor manifestó que “las personas que motivaron este expediente no lo han hecho por motivos dignos”.