Un juzgado social de Barcelona revocó la decisión del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y concedió la incapacidad permanente absoluta para todo tipo de trabajos a una madre de 26 años por las intensas migrañas que padece a diario, tras sufrir episodios de convulsiones durante el embarazo.

En su sentencia, el juzgado de lo social número 2 de Barcelona da la razón a la joven y condena a la Seguridad Social a abonar a la demandante una pensión vitalicia equivalente al 100 % de su base reguladora como trabajadora, de 1.186 euros, con catorce pagas al año, con efectos desde noviembre del año 2019.

La joven, representada por los servicios jurídicos de Tribunal Médico, recurrió la negativa inicial de la Seguridad Social de concederle la incapacidad permanente absoluta, tras lo cual el juzgado le ha dado la razón, al concluir que las migrañas que padece son frecuentes y le impiden trabajar con normalidad, no solo como dependienta en una ortopedia —como hasta ahora— sino en cualquier otra profesión.

La demandante alegó que sufría, entre otros síntomas incapacitantes, migrañas diarias, junto con vómitos y mareos, falta de concentración y de memoria, tras padecer una hemorragia intracraneal por convulsiones durante el embarazo, un fenómeno denominado eclampsia.

Cronicidad

Además, el informe del médico de familia certificó que las secuelas la limitan en las actividades de la vida diaria, precisando ayuda de terceros para hacerse cargo de su hija, por lo que ha sido derivada a la clínica del dolor, debido a la cronicidad de su dolencia, que no mejora con los tratamientos, pese a que han transcurrido más de dos años.