El vicepresidente primero de la Xunta, Alfonso Rueda, espera “evitar” un cierre completo de la hostelería en toda Galicia para hacer frente a la pandemia del coronavirus y aboga por “graduarla e intentar causar el menor perjuicio posible”. “Espero no tener que tomar esta medida”, afirmó ayer Rueda en una entrevista en la Radio Galega. en la que, sin embargo, reconoció que “si las cifras sanitarias lo indican, no quedaría más remedio”, aunque “siempre buscando, por lo menos, un mínimo funcionamiento” de los locales”. Así lo expresó el número dos de la Xunta dos días después de la entrada en vigor de medidas más duras en la comunidad, una vez fueron avaladas por el comité clínico. Desde el viernes, la hostelería cierra en toda Galicia a las 18.00 horas y, en aquellos lugares en nivel máximo de restricciones, solo puede servir en la terraza.

El titular de la Consellería de Presidencia, Xustiza e Turismo afirmó que la primera convocatoria de ayudas del Gobierno gallego ya está pagada al 90% con 15.000 beneficiarios. Asimismo, avanzó un segundo plan dialogado con el sector en el que la Administración autonómica “va a poner una cantidad muy importante” a disposición “lo más rápido posible”. “Estamos trabajando en ese diseño para, en el mes de febrero, empezar a pagar la segunda parte de las ayudas”, concretó.

Rueda reconoció que la comunidad pasa ahora por un “momento muy complicado” con respecto a la pandemia, lo cual justifica que “se tomen medidas y restricciones tan duras” y se le pida “ese esfuerzo a la población”. Según sus cálculos, las próximas “dos o tres semanas seguirán siendo complicadas”. No obstante, a pesar de este panorama en Galicia, valoró que la situación es “mucho menos” grave que en otras comunidades “desde el punto de vista de la presión hospitalaria, que es lo que debe preocupar”, señaló.

Rueda se mostró partidario de adelantar el toque de queda —en Galicia está establecido a las 22.00 horas, el máximo permitido por el actual estado de alarma—, aunque confía en evitar un aislamiento social “completo” en Galicia. “La situación, a día de hoy, desde luego está muy lejos de este extremo”, manifestó. Sin embargo, sí que reclamó al Gobierno central que “habilite herramientas legales” —en una modificación del decreto del estado de alarma— para aquellas autonomías que “quieren endurecer aún más las medidas”.

En este sentido, criticó la negativa del actual ministro de Sanidad, Salvador Illa, a permitir los confinamientos.