“Una parte muy significativa de la explosión de contagios que se produce en la tercera ola es consecuencia de la mutación del virus y de que esta cepa (la británica) se está convirtiendo en predominante”, defendió ayer el presidente de la Xunta. Con este argumento, intenta desmontar la acusación de la oposición de ser el responsable del a nueva ola de contagios por “intentar salvar la navidad”. Alberto Núñez Feijóo expuso ayer que en Galicia “al menos el 50% de los virus secuenciados son de la cepa británica”. La comunidad ha confirmado 41 casos y solo secuencia aquellos casos sospechosos por falta de aparatos para acometer esta labor. Feijóo insistió: “Si no hubiese mutado el virus, la situación en la que estamos sería menos preocupante. Pero el virus ha mutado y ya estamos comprobando que al menos el 50% del virus es una mutación de la cepa británica”. Un día antes el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, explicaba que no se podía dar un porcentaje de la presencia de la variante inglesa en la comunidad porque no se había secuenciado suficientes pruebas. Por otra parte, el presidente de la Xunta calificó de “profundamente desacertadas” las declaraciones de Carlos González Cueta, jefe de servicio de Alergología en el CHUO, poniendo en duda la vacuna contra el COVID. “No podemos entender como profesionales graduados en Medicina, con titulo de especialista, incluso jerárquicamente con la mayor responsabilidad de un servicio en el hospital puede hacer estas declaraciones. La Consellería de Sanidade las está estudiando por si son constitutivas de un expediente informativo. Veremos y actuaremos en consecuencia”, apuntó. Feijóo hizo una encendida defensa de la vacuna: “Es la única esperanza que tenemos para parar el virus. Esto no lo decimos los políticos, lo dice la sociedad científica internacional. Debemos disminuir aún que sean anecdóticas este tipo de declaraciones porque crean mucho desasosiego y porque además no se corresponden con la comunidad científica”.