Piden prudencia y muestran preocupación ante la relajación del uso de mascarillas en terrazas a rebosar. El estado de concurrencia de los locales en el primer día de la desescalada hizo saltar todas las alarmas. Sobre todo, cuando queda por delante un fin de semana de buen tiempo y reservas completas en la hostelería. “Es una vez más, un retroceso. No tardaremos en ver el efecto”, vaticinaron sobre la cuarta ola. Fuentes de la Xunta advierten de que en siete días podría haber un pico de contagios e incluso entrar en la cuarta ola, si no se respetan las medidas de precaución impuestas. Grupos sin mantener la distancia social o sin mascarillas fueron el foco de atención —también— para los epidemiólogos, que insisten en que “el nivel de vacunación sigue siendo muy bajo como para poder contener una nueva ola si la población se relaja de nuevo”. Las únicas maneras de frenar el virus aún hoy son dos: control del contacto social acompañado con medidas preventivas y las vacunas. Por tanto, sentidiño, aconsejan.

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, pidió prudencia. Aseguró que ese es el “principal criterio rector”: “Hemos mantenido que las terrazas tendrían que estar al 50% y estamos observando que no se está cumpliendo y ya nos hemos puesto en contacto con la Asociación de Hosteleros, para insistir en el mensaje”, destacó. “Haremos lo que corresponda”, avanzó al tiempo que reconoció que la Xunta comenzará el lunes las auditorías en la hostelería, —como antes se hizo en el Comercio— y “con todos los recursos posibles”. Una labor de control en la que también pidió apoyo a las fuerzas y cuerpos del Estado para, mantener esta “apertura prudente”.

¿Terrazas abarrotadas este fin de semana? “Somos conscientes de que se va a producir una movilidad, pero si se produce en un entorno exterior y conforme a las normas básicas que hemos adoptado, entra en el principio de prudencia. Si no se cumple, sí nos preocupa”, añadió Comesaña para confirmar luego que la actualización de restricciones por concellos se producirá el próximo martes.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, también habló de las vacunas e indicó que se espera que, a partir del lunes, el Gobierno central “cumpla su promesa” y Galicia empiece a recibir el 8,2% de vacunas “que le corresponden”, toda vez que tiene ese mismo porcentaje de mayores de 80 años, colectivo ‘diana’ en este momento para la administración de dosis frente a la COVID-19. Feijóo ha remarcado que la postura de Galicia es “conocida”, y ha incidido en que la Xunta es “consciente” de que el Gobierno central “no puede repartir más vacunas porque no las tiene” y que la compra centralizada de dosis “es un proyecto europeo”. “Pero con estas limitaciones y siendo consecuentes con la realidad sí planteamos que no estamos de acuerdo con el porcentaje de dosis que se trasladaron a Galicia desde el primer instante hasta ahora. Se nos traslada el 5% de dosis y tenemos el 24% de la población mayor de 65 años”, esgrimió el mandatario autonómico ayer en Santiago.

El profesor de la Universidad de Santiago, genetista e investigador, Antonio Salas hizo una oportuna reflexión relacionada con el rastreo de casos —de contagio—: “No hemos llegado a rebajar los casos hasta un nivel que permita la trazabilidad de las infecciones”, indicó. Sobre la posiblidad de una cuarta ola, este experto —uno de los que postularon el concepto de supercontagiadores— lo fió a la fecha en la que “se determinen nuevas restricciones”. Es decir, los posibles resultados de un descontrol en la actualidad serán “obvios”: una vuelta atrás. Consideración similar hizo el profesor e investigador del CSIC, Antonio Figueras: “ Me temo que, por desgracia, si sigue esta panorama nos acecha una cuarta ola”.

El médico preventivista Miguel Álvarez Deza hizo un llamamiento a la responsabilidad tras testar la situación del primer día desescalada: “Hemos pasado de la fatiga pandémica a una desbandada. Esto no se ha acabado, lamentablemente. Seguimos en plena pandemia y aún nos queda mucho camino”, denunció, consciente de la necesidad de extremar la prudencia este fin de semana, en el que las reservas para comidas están al borde del límite en muchos restaurantes.

También, en el contexto de que la variante británica se ha convertido en la mayoritaria en Galicia y que ya está circulando hasta casi el 70%. “Aunque está descendiendo la carga viral, lo cual es una buena noticia, los que se contagian con esta variante hace estancias más largas, tanto en ingresos como en UCI”, admitió Álvarez Deza. También, que “la curva de fallecimientos tardará más en descender”.

El epidemiólogo Juan Gestal alertó también de que “si no somos prudentes, la situación puede complicarse” y llamó a “extremar las medidas de prevención”. Y recordó uno de los conceptos claves de esta desescalada: “En este momento debemos reunirnos en burbujas, sólo con pocos amigos, los mismos y siempre manteniendo las normas: mascarilla y distancia”. La norma marca no más de cuatro no convivientes.

“Hasta el momento quedó demostrado que las medidas de contención convencionales han servido para frenar el virus, independientemente de las variantes circulantes y de las fiestas y reuniones ilegales (aquí, en Reino Unido, en Sudáfrica...)”, matiza Antonio Salas. “Lo contrario también es cierto: más relajación más contagios”.

Siete fallecidos por COVID y 6.273 contagiados

El Sergas notificó ayer la muerte de siete personas por COVID en los últimos dos días —concretamente seis el jueves y solo uno ayer—. Sanidade se hacía eco de cifras más positivas: los casos activos experimentan un nuevo descenso hasta los 6.273 (-499), con seis áreas por debajo del millar. El área sanitaria de A Coruña-Cee es, con diferencia, la que más casos tiene de Galicia: 2.019 enfermos. Este distrito sanitario aún dobla los índices del resto. Le sigue la demarcación de Vigo, con 995 diagnosticados. Tras ella se sitúan Pontevedra, con 884 casos; Santiago, con 694; Ferrol, con 665; Lugo, con 631; y Ourense, con 386. Galicia se abría a la desescalada ayer con un virus bajo contención: solo una de las siete áreas sanitarias supera los mil casos activos de COVID-19, la de A Coruña y Cee. Es la que más infectados con el virus ha registrado a lo largo de la tercera ola, en la que despuntó hasta los 6.020, con dos mil enfermos más que la segunda demarcación con mayor incidencia, la de Vigo.

La Xunta, en alerta al inicio de la desescalada: “Hay terrazas incumpliendo el 50% de aforo”

Debemos reunirnos en burbujas, con los mismos amigos (pocos) y siempre manteniendo las normas

Juan Gestal - Epidemiólogo

La Xunta, en alerta al inicio de la desescalada: “Hay terrazas incumpliendo el 50% de aforo”

La Xunta, en alerta al inicio de la desescalada: “Hay terrazas incumpliendo el 50% de aforo”

El nivel de vacunación es aún muy bajo para poder contener una nueva ola si la población se relaja

Antonio Salas - Genetista e investigador

La Xunta, en alerta al inicio de la desescalada: “Hay terrazas incumpliendo el 50% de aforo”

No hemos vuelto a la normalidad; seguimos en plena pandemia y aún nos queda mucho camino

Miguel Álvarez - Alertas Epidemiológicas

La Xunta, en alerta al inicio de la desescalada: “Hay terrazas incumpliendo el 50% de aforo”

Por desgracia me temo que, si sigue este panorama, de nuevo nos acecha una cuarta ola

Antonio Figueras - Prof. e investigador CSIC