Militares del Ejército de Tierra están realizando labores de rastreo de viajeros obligados a guardar cuarentena a su llegada a territorio español, como los procedentes de Brasil y Sudáfrica de donde proceden dos importantes variantes de COVID-19, informan fuentes sanitarias y castrenses. Los militares hacen este seguimiento por encargo del servicio de sanidad exterior del Ministerio de Sanidad, y en Catalunya es simultáneo al rastreo común de casos COVID y contactos estrechos que el Servei Català de la Salut realiza con personal civil.

El rastreo de viajeros en Barcelona es la principal misión de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica (UVE) del Ejército en Catalunya, y se lleva a cabo desde el cuartel del Bruc, sede del Regimiento de Infantería Barcelona 63. Los soldados hacen control telefónico de viajeros en cuarentena obligatoria también en los demás puntos de España susceptibles de recibir vuelos internacionales o atraques de buques, al tiempo y sin perjuicio de los rastreos de covid que realizan las sanidades autonómicas a sus habitantes.

Ampliación

Desde el pasado 22 de febrero deben guardar cuarentena a su llegada a España todas las personas procedentes de Sudáfrica, Comoras y Brasil. La vigilancia encargada a los militares persigue contener la afluencia de las variantes sudafricana y brasileña del COVID.

Fuentes de Defensa señalan la posibilidad de que en los próximos días se amplíen sus rastreos a viajeros procedentes de otros países americanos y africanos a los que se han extendido las variantes sudafricana y brasileña. Botsuana y Venezuela son los más atacados.

Del Consejo de Ministros salió el martes una prórroga de las limitaciones de entrada en España de vuelos brasileños y sudafricanos. Desde Brasil y Sudáfrica solo podrán volar a España ciudadanos españoles o andorranos, “así como residentes en ambos países o pasajeros en tránsito internacional a un país no Schengen con escala inferior a 24 horas sin abandonar la zona de tránsito del aeropuerto español”, señala una nota emitida por Sanidad.