La Consellería de Educación propondrá a los sindicatos en la próxima mesa sectorial que la oferta de oposiciones en la convocatoria correspondiente a este año cuente con 1.604 plazas. No obstante, las pruebas quedarán aplazadas a 2022. Así lo avanzó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, al término del Consello, para informar de los acuerdos adoptados en la reunión semanal del Ejecutivo autonómico.

La razón para no celebrarlas este año es que alterarían al desarrollo del curso. Además, dentro de tres meses se iniciarán las pruebas para más de 3.600 plazas que quedaron pendientes de 2020 al no poder realizarse por la pandemia.

En total, la oferta de empleo público correspondiente al ejercicio de 2021 será de más de 4.300 plazas, ya que también hay 1.215 del ámbito sanitario y 1.491 de la administración general, ambas cifras ya conocidas con anterioridad.

“En sanidad hacemos lo que podemos, agotamos la tasa máxima de reposición y sacamos el 110% de las vacantes”, destacó el presidente gallego, quien insistió en que a la Administración gallega le gustaría “sacar más plazas”, pero topa con el impedimento estatal. “Lo mismo ocurre” en el ámbito de la Administración xeral, continuó Núñez Feijóo, quien reclama al Gobierno que “se siente a escuchar” y recapacite en relación a la tasa de reposición.

Si ahora se sacan tantas plazas a oposición es porque se está intensificando el ritmo de jubilaciones. “Vamos a abrir la Administración a nuevos ánimos, nuevas energías y personal más joven”, advirtió.

De los 1.491 puestos para la administración general, 1.006 serán de acceso libre. La categorías más voluminosas serán las de auxiliares de clínica (140 plazas) y facultativo de jardín de infancia (101). Otras 322 plazas están destinadas a los procesos de promoción interna y 163 para continuar con la funcionarización voluntaria del personal laboral.