Los 20 minutos de pausa para el café que habitualmente se toman los trabajadores del Hospital de A Coruña tuvieron esta mañana un sabor muy diferente. Parte de la plantilla que desde hace un año trabaja en primera línea contra el coronavirus quiso rendir homenaje a las miles de personas que este año han tenido COVID y a sus familias. A quienes tuvieron que tratar, a quienes lo pasaron en casa sin tener que ingresar y muy especialmente a quienes no lograron superar la infección. "Queremos transmitir a todas las familias de los fallecidos que en ningún momento los dejamos solos, que a donde no pudo llegar ni la medicina ni las familias, estábamos nosotros intentando dar consuelo y cariño", explicaba la enfermera Mónica Pérez, que habló en representación de todos los trabajadores y recordó que ellos mismos han sido "pacientes y familiares de enfermos", por lo que saben "los momentos difíciles" por los que atravesaron los familiares que no pudieron ver a sus seres queridos durante estos meses.

El acto, en el que Carlota Iglesias interpretó Negra Sombra al chelo, contó también con la presencia de un paciente, en representación de los más de 20.000 que han pasado la enfermedad en el área sanitaria coruñesa. Manuel Sánchez Rubal, que ingresó el 3 de enero y tuvo que ver cómo el COVID afectaba también de forma grave a su hija de solo 29 años, quiso agradecer la labor de todo el personal - "desde la señora de la limpieza que era quien abría la ventana y era la persona a la que más deseaba ver cuando me faltaba el aire", señala- hasta médicos, enfermeros o auxiliares "cuyo único deseo era sacar a sus pacientes adelante con el mayor grado de satisfacción posible". "Gracias por luchar cuando nosotros no podíamos, gracias por celebrar la vida", concluyó emocionado este coruñés.

El acto de homenaje, celebrado en una terraza del Hotel del Pacientes del centro sanitario coruñés, concluyó con una simbólica suelta de globos blancos en forma de corazón y un minuto de silencio en respeto a los fallecidos. "Esperemos que esta situación no se repita, que no tengais que volver a necesitarnos", señalaba la enfermera Mónica Pérez a las famlias, para terminar: "Pero si es necesario, siempre estaremos aquí"