La Agencia Europea del Medicamento (EMA) prevé pronunciarse mañana sobre la seguridad de Janssen tras la investigación debido a seis casos de trombos muy raros detectados en pacientes que recibieron esta vacuna en Estados Unidos. De superar el escrutinio, permitiría acelerar las vacunaciones en la Unión Europea.

Fueron seis casos de entre 6,8 millones de personas que recibieron esta vacuna de la filial de Johnson & Johnson, pero fueron suficientes como para que las autoridades sanitarias estadounidenses paralizaran su uso de forma temporal e hicieran que la farmacéutica retrasara la entrega de dosis a la UE e impidiera el uso de las ya entregadas.

Los casos que está investigando el PRAC, el comité que evalúa los problemas de seguridad de los medicamentos de uso humano en la EMA, afectan a seis personas en EEUU que recibieron el fármaco de Janssen y desarrollaron síntomas de trombos cerebrales venosos, en combinación con niveles bajos de plaquetas de sangre (trombocitopenia).

En Estados Unidos, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) recomendaron el martes suspender el uso de Janssen hasta que se investiguen estos casos de un tipo de coágulo sanguíneo “raro y grave” y determinar si hay una relación causal con esta vacuna.