El Servizo Galego de Saúde (Sergas) arrancará esta próxima semana la administración de las segundas dosis de la vacuna contra el COVID a la franja de entre 70 y 79 años, una vez transcurridas tres semanas desde que se inició la campaña en este grupo. Así lo avanzó el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, durante una visita al recinto de Silleda (Pontevedra) donde se realizan las pruebas de acceso a los servicios generales del Sergas correspondientes al apartado de discapacidad intelectual.

El titular de Sanidade confirmó que a partir de mañana “muchas dosis” estarán destinadas a completar la inmunización del grupo de 70 a 79 años, ya que “van a coincidir las tres semanas” desde que recibieron la primera, después de la Semana Santa. No obstante, de manera paralela, el Sergas proseguirá con la administración de primeras dosis al resto de pacientes pertenecientes a este mismo colectivo, que reciben el modelo de Pfizer y el de Moderna.

A lo largo de la jornada de ayer, estaba prevista la vacunación de casi 11.200 personas en las siete áreas sanitarias gallegas. De todas ellas, 10.938 tenían pautada la dosis de Pfizer, 150, de Janssen —que se emplean en grandes dependientes y personas mayores de 80 que no pueden desplazarse—, y 100, de Moderna.

En este contexto, el conselleiro ratificó que hay “varios grupos abiertos” en estos momentos. Por un lado, el Sergas completa la inmunización de los mayores de 80, está “acabando” con el grupo de 70 a 79 y prosigue con la administración del modelo AstraZeneca a pacientes de 60 a 65 años —todavía falta por concretar cuándo arrancará la campaña en la franja de 65 a 69-—. “Ahora tenemos que tomar decisiones con los siguientes pasos que vamos a dar, por supuesto dentro de la estrategia nacional de vacunación y teniendo en cuenta también el ritmo de vacunas que nos llegan”, resumió García Comesaña.

El titular de Sanidade resaltó el “ritmo alto” de vacunación alcanzado por el Sergas, que está “poniendo todas” las dosis que llegan a excepción de “una pequeña proporción” que se reserva para garantizar la disponibilidad de segundas dosis, principalmente de Moderna y AstraZeneca, ya que “el suministro no es tan regular”.

Cribados en colegios

Mientras tanto, el Sergas sigue con su dispositivo de cribados en colegios, ya que a raíz de la vacunación se observa “una disminución de incidencia en personas mayores” junto a un ligero incremento en la población más joven.

“Decidimos poner nuestra fuerza diagnóstica en los colegios, por una parte para detectar casos allí y también para detectar casos asintomáticos en sus entornos y familias”, explicó el conselleiro de Sanidade. En este sentido, Julio García Comesaña confirmó que “evidentemente” los colegios más afectados por la pandemia de COVID son aquellos situados en las zonas con “peor” situación epidemiológica, “como no podía ser de otro modo”.

Es el caso del área sanitaria de Pontevedra y O Salnés, donde las farmacias pusieron a disposición de los menores de 12 a 17 años un sistema de PCR de saliva gracias al cual se detectaron nueve positivos de un total de 7.500 pruebas, según datos que ha ofrecido el conselleiro.

“Son nueve positivos que a su vez nos llevaron a detectar más positivos en sus entornos familiares, que es importante también”, subrayó.