El ocio nocturno aún no tiene fecha de reapertura pero sí la prueba piloto que Xunta y empresarios del sector han acordado en la reunión de esta mañana. La sala Pelícano de A Coruña y otros cinco locales de ocio nocturno, cuatro de ellos pubs, serán los escenarios de una prueba marcada en rojo en el calendario para los locales de la movida: el 12 de junio. Además de la discoteca coruñesa, los establecimientos propuestos para las pruebas son: Sónar, en Santiago, donde la propuesta inicial era la sala Capitol; Anagrama, en Lugo; Pomada, en Pontevedra; Tokyo, en Vigo; y Miudiño, en Ourense.

La ocupación de estos seis establecimientos no podrá superar el 50% del aforo en el interior y el 75% en terrazas y espacios al aire libre. Habrá una separación mínima de 1,5 metros entre mesas y cerrarán a la 1 de la madrugada. Además habrá un riguroso control de acceso con PCR negativa, la mascarilla será obligatoria, se medirá el CO2, y se efectuará un registro de asistentes.

El plan incluye medidas sanitarias y una recomendación de buenas prácticas que se deberá tener en cuenta para una desescalada del sector que será gradual, dinámica y reversible. En este sentido, contempla que para entrar en las dos discotecas será necesario hacerlo con invitación previa y con una PCR negativa. En todos los locales el uso de la mascarilla será obligatoria. Además, la ocupación de los locales no podrá superar el 50 por ciento de su capacidad en el interior y el 75 por ciento en terrazas y espacios al aire libre.

Deberá garantizarse la separación mínima de 1,5 metros entre mesas, así como las distancias interpersonales y los responsables de los locales deberán declarar y exhibir la ocupación máxima, así como llevar un control y un registro de los clientes que tendrán que guardar durante tres meses para poder ser localizados en caso de brotes. También deberán garantizar la correcta ventilación empleando aparatos medidores de CO2.

Los establecimientos que participen en la prueba deberán cerrar las puertas a la una de la mañana, límite horario actual para los restaurantes. Desde la Xunta, consideran que el pilotaje permitirá obtener datos en varios establecimientos y su estudio facilitará mejorar las medidas para la reactivación del ocio nocturno cuando se den las circunstancias.