La Xunta realizará el 19 de junio cinco pruebas piloto con orquestas en cinco concellos diferentes, todavía sin confirmar en cuáles, pero será al menos uno por cada provincia, para ensayar el funcionamiento del protocolo que regirá la desescalada del sector cultural en la comunidad. Es la principal novedad de la propuesta que el Gobierno gallego presentó ayer en el Café Moderno de Pontevedra, en un acto en el que participaron representantes del sector cultural, junto al vicepresidente autonómico, Alfonso Rueda; el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, y el de Cultura y Educación, Román Rodríguez.

Fue este último el que explicó los pormenores del documento que servirá como hoja de ruta para la reactivación de los eventos culturales al aire libre en Galicia. Con la vista puesta en el mes de julio, la Xunta prevé un regreso progresivo de conciertos, verbenas, romerías, fiestas patronales y festivales de música, después de varios meses en los que se han tenido que cancelar, reprogramar calendarios y adaptar algunos formatos debido a la actual situación de crisis sanitaria.

En el protocolo se diferencian dos tipologías de eventos según la afluencia de público que se planifique. Por un lado, los espectáculos de pequeño o medio formato, con un máximo de mil espectadores, y por otro, los de gran formato, con un tope de público inicial de 5.000 personas, pero que recintos de gran aforo, como puede ser el Monte do Gozo, en Santiago, o estadios de fútbol, se podría ampliar hasta las 10.000.

En este último caso de eventos de gran formato, el aforo permitido será del 50% del total de las instalaciones. Los asistentes tendrán que permanecer sentados y se ubicarán en grupos burbuja de mil personas, permitiéndose la agrupación de hasta seis, con una distancia de seguridad de un metro y medio entre las sillas. Estará permitido comer y beber y cada sector burbuja contará con entradas y salidas independientes.

En cuanto a los pequeños y medianos eventos, como verbenas, romerías, fiestas patronales o pequeños festivales y conciertos, el aforo será de un tercio de las instalaciones y será necesario un espacio de tres metros cuadrados por persona. Los asistentes podrán estar de pie y no podrán consumir ni comida ni bebida, tendrán que estar siempre con mascarilla y respetando una distancia mínima entre personas. A cambio se podrá bailar, pero juntos solo convivientes.

En cualquier caso, estos eventos tendrán que ser al aire libre y se tendrán que respetar unas normas comunes, como llevar un registro de asistentes, reserva de entradas, controles de acceso y salida, distancias de seguridad interpersonal, medidas higiénico-sanitarias y uso de mascarillas.

Tal y como explicó el conselleiro de Educación y Cultura, Román Rodríguez, la Xunta está pendiente de un protocolo similar que está elaborando el Ministerio de Cultura para evitar contradicciones entre los textos, pero han querido presentar cuanto antes su propuesta para que el sector pueda empezar a trabajar con antelación en la planificación de los eventos que tiene previsto organizar este verano.

El vicepresidente primero de la Xunta, Alfonso Rueda, señaló que esta “desescalada con sentidiño” en el sector cultural “no va a ser volver a la actividad como antes de la pandemia, pero sí es un paso adelante para este verano”. El vicepresidente de la Xunta subrayó la importancia del sector cultural desde el punto de vista turístico y de promoción de Galicia.