Un total de 126.164 extranjeros residentes en España adquirió la nacionalidad española en 2020, un aumento del 27,5 % respecto al año anterior, y entre ellos destacan los marroquíes (28.258), colombianos (9.010) y ecuatorianos (8.328).

Son los datos provisionales de la Estadística de Adquisiciones de Nacionalidad Española de Residentes que ha hecho pública este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE), que muestra cómo el ritmo de concesiones está en ascenso.

El año pasado se alcanzó de hecho la cifra de concesiones más alta desde 2016, aunque está todavía lejos de las registradas en 2013 o 2014, cuando se superaban las 200.000 nacionalidades concedidas al año, y sigue habiendo un importante número de expedientes atascados sin resolver.

El 53,2 % de las personas extranjeras que consiguieron la nacionalidad española fueron mujeres y el 46,8 %, hombres. Por edades, el grupo más numeroso tiene entre 30 y 39 años, seguido de cerca de aquellos que tienen entre 40 y 49.

Como en años previos, la de Marruecos fue la nacionalidad de origen más frecuente y a continuación se situaron países sudamericanos, de Centroamérica y del Caribe. Ocho de los diez principales países de origen son de esa región.

Tras Marruecos, Colombia y Ecuador, aparecen Bolivia (7.790), República Dominicana (6.894), Venezuela (5.814), Cuba (5.395), Pakistán (4.446), Perú (4.218) y Honduras (3.866).

Por países de nacimiento sin embargo, encabeza la lista España: 26.407 extranjeros que obtuvieron el año pasado la nacionalidad habían nacido ya en este país.

Y destaca el caso de Marruecos, ya que el 46 % de los marroquíes que accedieron a la nacionalidad española habían nacido en España. En el caso de las latinoamericanos los porcentajes son mucho más bajos.

De acuerdo con los datos del INE, Cataluña (con 34.924 casos) y Madrid (con 25.284) concentraron el 47,7 % de las adquisiciones de nacionalidad, mientras que Extremadura (574) y La Rioja (841) fueron las comunidades con menores cifras.

Sin embargo, si se compara el número de nacionalidades con el total de población extranjera residente en cada comunidad, destacan el caso de el País Vasco, donde el 4,3 % de los extranjeros adquirió la nacionalidad el año pasado.

Tras esa comunidad se situaron Murcia (3,5 %) y Cataluña (3,2 %) y, en la cola aparecen Canarias (1,5 %), Baleares (1,6 %) y Andalucía (1,6 %).

Las concesiones de nacionalidad a residentes están en aumento, pero desde hace años se arrastra un importante atasco en el ritmo de resoluciones, que se frenó de forma drástica en 2017, cuando se otorgaron menos de 66.500.

Desde entonces ha ido incrementándose de forma progresiva, pero el pasado marzo se acumulaban todavía cerca de 300.000 expedientes de nacionalidad por residencia y más de 54.000 peticiones de sefardíes pendientes de resolución, según datos del Ministerio de Justicia.

Ese departamento anunció entonces un segundo plan de choque para intentar resolver el problema, basado en horas extras de los funcionarios y con un presupuesto de 1,8 millones de euros.

El titular del Ministerio, Juan Carlos Campo, admitió que el retraso en la resolución de expedientes era "inasumible" y confió en presentar resultados del plan a fin de año.