El Festival de Cine de Málaga su 24ºedición hace dos fines de semana, desde el 4 a 6 de junio y la invitada que más titulares protagonizó fue la gallega María Castro, que acudió con su bebé y no tuvo ningún reparo en darle el pecho en público. Una acción con tintes reivindicativos y políticos con un trasfondo en el que merece la pena profundizar. Pero por ahora tratamos el inesperado atuendo que también ha dado mucho de qué hablar.

El vestido con el que sorprendió a todos los asistentes también fue el ángulo en el que se centraron los flashes del "photocall". María Castro, muy involucrada en su maternidad, reconoció no tener tiempo de escoger ropa de "showroom en showroom". La prenda causó furor y la convirtió en la más elegante de la fiesta.

Se trata de su segundo vestido de novia, el que utilizó para su segunda boda en la que contrajo matrimonio con su actual marido, José Manuel Villalba.

Ella misma se encargó de desvelar la anécdota en su cuenta de Instagram, donde suma más de 700.000 seguidores. En uno de sus stories, la actriz desveló la sorpresa con la naturalidad que le caracteriza dirigiéndose a su marido, José Manuel Villalba, al que dio el sí quiero en su Galicia natal.

El vestido en cuestión, de diseño romántico en blanco roto que la actriz confesó que le hacía especial ilusión reciclar, por el significado emocional.

A su vuelta, la Influencer gallega posó con su prenda en Instagram y acompañó su post con una leyenda que reza:

"Al final el vestido de mi boda gustó, y mucho!!! Si es que desde siempre, la/el que guarda, tiene!!!! Si es que desde siempre, la/el que guarda, tiene!!!!Como conté por ahí, ( aquí no se oculta nada) no tenía demasiado tiempo para ir de showroom en showroom buscando el vestido perfecto... de hecho no creo en “el vestido perfecto”, ni siquiera perseguía esa filosofía cuando me casé... Buscaba (en mi gran día), y busco en cada ocasión, vestidos con los que sentirme yo... que resalten lo que soy, sin que me disfracen, y con los que además me sienta cómoda!!! Me sienta yo. Cuando fui al trastero a rescatarlo, parecía un vestido sin dueña... abandonado ( es que en la boda lo exprimí al máximo, llegando a anudar hasta la cola), pero oye, fue limpiarlo, plancharlo y mimarlo un poco.... y como nuevo!!!! Quién dice ahora que los vestidos de boda son sólo para la ocasión y ya??? Pues con este ya van dos “ocasiones” y no será la última... Porque no sólo me encanta , sino que fue ponérmelo ayer, y no recordar, SENTIR!!! , lo feliz y plena que fui en aquel gran día... NUESTRO gran día. Qué mágico, eso de viajar a través de los olores, sabores, texturas e imágenes."

María Castro, protagonista absoluta del "photocall"

María Castro confesó: "En la boda tenía un par de vestidos, uno para la ceremonia y otro para el baile, un poco más informal, muy romántico. Y ese ha sido el diseño que hoy ha rescatado por ser el más simbólico. Después de pasarlo por la tintorería ha quedado como nuevo"

Dar visibilidad a la maternidad: una cuestión política

María Castro se puede considerar, más allá de una activista, una mujer que aprovecha su popularidad para dar visibilidad a las cuestiones sociales que lo merecen. Pudo, como muchas otras asistentes, dejar a su hijo con su familia o una cuidadora y, sin embargo, decidió llevárselo al Festival y darle el pecho en público causando el estupor de los asistentes pero a la vez creando un precedente histórico.

Anterior aportación a la maternidad fue difundir en redes su cuerpo al desnudo tras dar a luz para así concienciar a muchas mujeres que recuperarse físicamente del parto no es tan fácil ante la confusión que ocasionan muchas "celebrities".

La actriz gallega María Castro se une a la comunidad de celebridades que destapan el velo que durante años escondió las consecuencias de tener hijos. Siete meses después del nacimiento de su segunda hija, Olivia, la actriz gallega se confiesa y aporta una serie de consejos a futuras madres.

Durante décadas el parto se blanqueó, sólo se difundía su cara positiva mediante entrevistas a famosas recién paridas con rostros perfectamente maquillados para la ocasión y siluetas recuperadas de forma "exprés" quirófano mediante poco tiempo después.

El cine mostraba fotogramas idílicos del proceso de traer un hijo al mundo pero, fruto de los testimonios de muchas mujeres que se enfrentaron poco informadas al embarazo y sufrieron consecuencias inesperadas, este año se estrenó la crudísima película "Fragmentos de una mujer", de Kornél Mundruczó y se publicaron decenas de libros que abordan el proceso de traer a un hijo al mundo bajo una perspectiva realista.

Para evitar que se siga repitiendo esta situación y mentalizar a la sociedad, rostros visibles como el de la actriz gallega muestran el proceso:

En el texto que acompaña el contenido multimedia explica: "'Lo que pides' versus 'lo que te llega', 'Lo que ves' versus 'lo que hay', 'Barriga mamifit' versus 'barriga slime'".

En el vídeo muestra un vientre ya plano, pero no terso y todavía lejos de estar tonificado. Es lo natural después de siete meses teniendo en cuenta lo que da de sí la piel del vientre durante la gestación. De esta manera evita la frustración de otras madres a quienes sólo le han llegado las imágenes de las famosas "madres fitness".

En otro vídeo muestra la rutina de ejercicios tras su embarazo (al igual que hizo Pilar Rubio en su momento) con las que poco a poco recupera su figura e invita a las mujeres a que, además de a sus retoños, se mimen y se cuiden un rato al día a sí mismas y por sí mismas.

Los ejercicios de suelo pélvico y el deporte junto al esfuerzo, la dedicación y la constancia consiguen los resultados deseados, pero no inmediatos.