El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confirmó ayer que “pronto” la mascarilla dejará de ser obligatoria en la calle y que, por tanto, el verano en España será sin el cubrebocas, que lleva más de un año siendo de uso obligado. “Pronto vamos a abandonar las mascarillas en la calle” gracias a que España ha alcanzado “velocidad de crucero en la vacunación”, afirmó ayer el presidente durante un encuentro empresarial en Madrid.

“En unos días vamos a tener más de 15 millones de personas con pauta completa y en unas semanas el 50% de la población al menos con una dosis”, destacó Sánchez, que no concretó, no obstante, cuándo será posible estar sin mascarillas en el exterior. La propuesta, que defienden ya varias comunidades autónomas, como Galicia, Cataluña, Baleares, Madrid o Murcia, será previsiblemente debatida en la reunión del Consejo Interterritorial de la semana que viene.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, volvió a reclamar ayer a Pedro Sánchez que la mascarilla deje de ser obligatoria en exteriores. El líder del PPdeG confía en “no llegar tarde” otra vez a esta decisión teniendo en cuenta que la vacunación tiene una “velocidad de crucero intensa”. “No tiene sentido ir solo por un pueblo con mascarilla”, explicó el mandatario gallego.

Por otra parte, las comunidades autónomas notificaron ayer 3.832 nuevos casos de COVID-19, 1.922 de ellos diagnosticados en las últimas 24 horas. La cifra total de contagios en España se elevó de este modo a 3.749.031 desde el inicio de la pandemia, según las estadísticas oficiales. La incidencia acumulada (IA) en los últimos 14 días por 100.000 habitantes se situó en 98,78, frente a 101,39 del día anterior. Esto supuso que la IA bajó por primera vez de 100 desde el 12 de agosto del año pasado. No obstante, algunas comunidades todavía se encuentran notablemente por encima del umbral, como La Rioja (171 por 100.000) y Andalucía (178).

Por otra parte, en las últimas dos semanas se han registrado un total de 46.871 casos positivos.