India registró ayer algo menos de 60.000 infecciones por coronavirus por primera vez en tres meses, tras sufrir una virulenta segunda ola que colapsó el sector sanitario y causó falta de camas de cuidados intensivos y oxígeno.

El número de contagios detectados en las últimas 24 horas ascendió a 58.419, la cifra más baja en 81 días. El total de casos desde el inicio de la pandemia en el país asiático asciende ya a 29,8 millones, una cifra solo superada en el mundo por Estados Unidos con 33,5 millones.