Las orquestas gallegas están deseosas de volver a subirse a los escenarios, algo que ven “extremadamente difícil a día de hoy” y temen que el sector no se reactive este verano. “La reactivación de un sector no es el 5% de trabajo ni basta con decir que se pueden hacer fiestas si estas no cuentan con ayudas similares a las de otros sectores para su reactivación”, alegan las asociaciones del sector.

Según Manuel Fariña, presidente de la Asociación Galega de Orquestas (AGO), aseguró ayer que ni el protocolo ayuda a que puedan celebrarse, ya que es “difícil de llevar a cabo”, ni los ayuntamientos “están por la labor” de cooperar con el sector. “Ni los concellos ni el protocolo animan a las comisiones de fiestas a organizar estos festejos, tan importantes para los gallego”. Asimismo, denunciaron el absoluto abandono por parte del Gobierno central y aseguraron que las ayudas de la Xunta son claramente insuficientes “para paliar semejante desastre”.

Por todo ello, el colectivo demanda una normativa “asumible” y colaboración por parte de los consistorios locales para respaldar en la “logística” a las comisiones de fiestas. También reclama ayudas directas para el sector y que el Xacobeo 21-22 las tenga en cuenta en su programación.

Según Fariña, de 120 orquestas quedan dos decenas en disposición de trabajar, ya que muchos de sus trabajadores han tenido que emplearse en otros sectores, y advirtió del riesgo de que no quede ninguna antes de que acabe la pandemia.