El subcomité clínico que asesora a la Xunta en la pandemia se volverá a reunir esta tarde, y la evolución de las cifras en la demarcación coruñesa amenaza con un posible endurecimiento de las limitaciones en las localidades con peores datos. A la espera de conocerse el balance de hoy, preocupan especialmente los números de la ciudad de A Coruña y su área metropolitana, así como los de Carballo, en la comarca de Bergantiños. En la última semana, tanto la urbe coruñesa, como Oleiros y Cambre, duplicaron sus tasas de incidencia a 14 y 7 días. El concello cambrés, de hecho, prácticamente triplicó sus datos, al pasar de 121 casos por cada cien mil habitantes a 309, y de 73 a 235, respectivamente.

El municipio de la demarcación coruñesa con peores tasas de incidencia es, sin embargo, Oleiros, que en la última semana pasó de registrar 216 infecciones por cada cien mil habitantes a 14 días, y 167 a 7, a contabilizar 489 y 322, respectivamente.

La ciudad de A Coruña, por su parte, presenta ya una incidencia acumulada de 355 casos por cada cien mil habitantes a 14 días, y de 255 a una semana, cuando hace solo 7 días esos mismos valores eran 171 y 100.

Culleredo, el único concello del área sanitaria coruñesa que a día de hoy está en el nivel medio de restricciones —lo que implica una reducción de los aforos de la hostelería, al 30% en el interior y al 50% en las terrazas—, pasó de contabilizar 224 casos por cada cien mil habitantes a 14 días, y 129 a 7, hace una semana, a registrar incidencias acumuladas de 345 y 218, respectivamente, en la actualidad.

Arteixo, por su parte, presenta una incidencia acumulada a dos semanas de 244 infecciones por cada cien mil habitantes, y 174 a 7 días, frente a las 146 y 143, respectivamente, registradas el lunes de la pasada semana. El concello arteixán es, por tanto, el único municipio de la almendra conformada por la ciudad A Coruña y su área metropolitana que todavía no sobrepasa —aunque sí roza— el umbral de los 250 casos por cada cien mil habitantes a 14 días, establecido por las autoridades sanitarias para considerar que un territorio está en riesgo extremo, lo que implicaría mantener el interior de la hostelería cerrado y la terrazas al 50%. En base a esa escala, fijada el año pasado, el 90% de la población del área metropolitana coruñesa se encontraría en ese nivel, aunque el escenario actual no es el mismo, de ahí que ese tipo de medidas no estén, actualmente, sobre la mesa del subcomité clínico que asesora a la Xunta en la emergencia sanitaria.

En el resto de la comarca coruñesa, Sada presenta una incidencia acumulada a 14 días de 216 casos por cada cien mil habitantes, frente a los 111 de hace una semana, y de 160 a 7. Las tasas de Carral, por su parte, son de 260 y 185 casos por cada cien mil habitantes a 14 y 7 días, respectivamente; mientras que Abegondo suma 203 casos por cada cien mil habitantes a dos semanas (en los últimos siete días, notificó menos de 10 contagios); en el último medio mes, Bergondo solo registró entre 1 y 9 positivos.

Más allá de la ciudad de A Coruña y su área metropolitana, el concello del área sanitaria coruñesa cuya evolución preocupa más a los expertos del subcomité clínico es Carballo, que en la última semana pasó de incidencias acumuladas a 14 y 7 días de 146 y 134 casos por cada cien mil habitantes, a 429 y 296, respectivamente. En la comarca de Bergantiños también, A Laracha se mantiene estable, con tasas de incidencia de 280 y 131, a 14 y 7 días, respectivamente. Cabe destacar que el concello larachés era uno de los municipios de la demarcación sanitaria con peores datos hace una semana (254 y 149).

Betanzos, por su parte, presenta tasas de incidencia de 237 casos por cada cien mil habitantes a 14 días, y de 160 a 7, cuando hace una semana eran de 176 y 76, respectivamente.