Entre lo que el tsunami del COVID arrasó están las listas de espera de 2019. En julio de ese año, los coruñeses tenían que esperar menos que nunca para acceder a un quirófano: una media de 60,8 días. Doce meses después, la primera ola de la pandemia de SARS-CoV-2 había anegado las expectativas y disparado la demora media para cirugías, en el área de A Coruña y Cee, a 121,5 jornadas. No obstante, y pese a estar inmersos ya en una quinta ola, la situación quirúrgica ha mejorado en la demarcación sanitaria, que cerró el pasado junio con 74,3 días de espera media, lo que supone una reducción de un mes y medio con respecto a un año antes, según el balance presentado ayer por el Servizo Galego de Saúde (Sergas).

En base a esos datos, el área de A Coruña y Cee es la tercera demarcación sanitaria de Galicia donde los pacientes aguardan más, en general, para entrar en quirófano, por detrás de las de Ourense y Verín y Ferrol, con 77,9 y 77,5 días de demora media, respectivamente. Y aunque los coruñeses esperan una media de 74,3 jornadas para ser intervenidos quirúrgicamente, los tiempos se acortan, radicalmente, cuando se trata de enfermos de prioridad 1, fundamentalmente oncológicos o con patologías cardiovasculares muy graves. En estos casos, la demora media es de apenas dos semanas. En concreto, 15,6 días, muy por debajo del objetivo asistencial del Sergas, fijado en 30.

Durante el primer semestre de este año, en los quirófanos de la demarcación sanitaria coruñesa —Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac), principalmente, y Hospital Virxe da Xunqueira de Cee— se realizaron un total de 16.714 intervenciones quirúrgicas, 3.125 más que entre enero y junio de 2020, según los datos del Sergas. En ese mismo periodo se llevaron a cabo, además, 131 trasplantes de órganos. Uno cada 30 horas.

En el primer semestre se realizaron 131 trasplantes en el Hospital Universitario; uno cada 30 horas

Casi 7.400 coruñeses aguardaban una operación, al cierre del pasado junio, según el balance hecho público ayer por el Sergas. Doce meses antes, engrosaban las listas de espera quirúrgica del área de A Coruña y Cee un total de 7.588 pacientes, por lo que el descenso, en este caso, no es tan acusado como el de los tiempos. Hace dos años, eran 7.029 y, justo antes de la pandemia de COVID, en diciembre de 2019, había 7.680 ciudadanos pendientes de someterse a una cirugía en la demarcación sanitaria.

Por especialidades, el área con mayor demora quirúrgica en A Coruña es, en la actualidad, Traumatología, donde los pacientes aguardan una media 106,8 días para entrar en quirófano. Casi tres meses y medio. Le siguen, por este orden, Neurocirugía y Cirugía cardíaca, con esperas medias de 102,3 y 92,1 jornadas. En el extremo opuesto de la balanza se sitúan Cirugía torácica, Oftalmología y Cirugía maxilofacial, con 36, 47,5 y 48,5 días de demora media, respectivamente.

CONSULTAS EXTERNAS

En cuanto al área de consultas externas, el balance del Sergas revela que algo más de 31.000 coruñeses están pendientes de acudir a una primera consulta con un especialista, y que la demora media asciende, en general, a 37,9 días. Hace un año, justo después de la primera ola de la pandemia y el confinamiento domiciliario, había muchos menos pacientes en esa situación, 18.664, pero tenían que aguardar, de media, 58,5 días. Casi dos meses. A 30 de junio de 2019, eran 28.254, y el tiempo medio de espera, 29,6 jornadas.

El número total de consultas realizadas en el área sanitaria de A Coruña y Cee, a lo largo del primer semestre de este año, asciende a 374.097, lo que supone 55.164 más que en el mismo periodo de 2020.

Neurocirugía es, en la actualidad, la especialidad que presenta peores números con muchísima diferencia, pues la espera media asciende, en este caso, a 99,5 días. Le siguen Oftalmología, Traumatología y Neurología, con demoras medias de 43, 39,2 y 38, 9 jornadas, respectivamente. Frente a ellas, Obstectricia, Cirugía torácica y Radioterapia, con menos de cinco días de espera.

Con respecto a las vías rápidas de consulta, el tiempo medio de espera para acceder a ellas es de 4,3 días, muy por debajo del objetivo de 15 establecido por el Sergas.

Seis meses de espera media para una resonancia, cinco para una endoscopia digestiva y más de tres para un TAC

Más de 29.700 coruñeses están pendientes de someterse a una prueba diagnóstica, según el balance hecho público ayer por el Sergas, que destaca que el tiempo medio de espera para su realización se redujo, en general, en más de 37 días, al pasar de las 116,6 jornadas que había que aguardar, de media, hace un año, a las 79,3 actuales. No obstante, los tiempos varían, considerablemente, en función de la prueba, siendo la resonancia magnética la que presenta una mayor demora media, 187,3 días, seguida de la endoscopia digestiva, la ecocardiografía y el TAC, con esperas de 156,1, 110,8 y 100 jornadas, respectivamente. Aún así, desde el Sergas destacan que la demora para la realización de esta última prueba en el área sanitaria coruñesa se redujo en 35 días, en el primer semestre del año, con respecto al mismo periodo de 2020. En el caso de otras pruebas, como la endoscopia digestiva, la mejoría sería incluso mayor —de 50 días, según el balance hecho público ayer—, mientras que para los estudios de alergia, Cardiología o Urología, las esperas disminuyeron en 39, 38 y 8 jornadas.