Las vacaciones y la mayor movilidad que se produce en verano han provocado que la fotografía de concellos más afectados en el área sanitaria de A Coruña haya cambiado. Si a lo largo de toda la pandemia la ciudad y su comarca han sido con diferencia la zona con mayor incidencia de casos, en pleno agosto son cuatro municipios turísticos da Costa da Morte —Fisterra, Laxe, Malpica y Muxía— los que registran los peores datos de toda la demarcación (superan el millar de casos a catorce días por cien mil habitantes) y su incidencia duplica la del ayuntamiento de A Coruña y otros limítrofes como Cambre, Oleiros o Culleredo.

Los últimos datos del Sergas revelan que todos los concellos del área sanitaria coruñesa excepto Dumbría están en riesgo extremo de transmisión del virus, es decir, tienen una incidencia de más de 250 casos de COVID a catorce días por 100.000 habitantes. Pero hay grandes diferencias entre unos y otros. Fisterra es ahora mismo el concello con peores datos al registrar una incidencia de 1.277 que alcanza porque en las últimas dos semanas se han detectado 60 positivos en una localidad con apenas 4.700 habitantes. Le sigue de cerca otro concello con alto número de turistas: Laxe, con una incidencia de 1.204 tras registrar 36 casos en una población de 3.000 vecinos. El pódium de concellos coruñeses con peor incidencia de coronavirus se completa con otra localidad que en verano multiplica su población: Malpica, que tiene 1.102 de incidencia al notificar 59 casos en dos semanas. También por encima del millar (1.066) se sitúa Muxía, donde se registraron 49 en los últimos catorce días y donde hoy mismo el Sergas ha convocado a los vecinos de 15 a 30 años para que sometan a un cribado con PCR en el centro de salud de la localidad.

Estos cuatro ayuntamientos forman parte de los doce coruñeses que desde hoy están en nivel alto de restricciones (al tener una incidencia superior a 500) y se sitúan muy por encima de A Coruña y su área metropolitana, donde habitualmente suelen darse las tasas de casos por habitante más elevadas. En concreto, Fisterra, Laxe, Malpica y Muxía duplican la incidencia de la ciudad, que ayer se situaba en 554 casos a catorce días, así como la de Oleiros (446), Culleredo (475) o Cambre (463), todos ellos en nivel medio.

Pese a no llegar al millar de incidencia, hay otros concellos coruñeses donde preocupa la transmisión del virus al superar los 900 casos. Son Betanzos —con una incidencia de 965, provocada en parte por el brote con una treintena de afectados en la residencia Hermano García—, Coirós (917), Zas (910) y Cabana de Bergantiños (901). Además, otros municipios con afluencia de gente en verano como Corcubión o Miño superan los 600 de incidencia y se quedan también por encima de los 500 en Ponteceso, Vimianzo, Cee o Paderne.

Y en el otro lado de la balanza, solo cinco concellos que no rebasan los 300 de incidencia, la mayoría de interior y con un denominador común: ninguno registró más de diez nuevos positivos en los últimos catorce días. Se trata de Dumbría (170), Aranga (270), Carral (278), A Laracha (280) y Sobrado (289), según los últimos datos publicados ayer por el Sergas.

Si el foco se pone en la comarca coruñesa, Betanzos y Sada registran los peores datos con una incidencia de 965 y 593, respectivamente. También por encima del medio millar se sitúa A Coruña. Con el balance de ayer, la ciudad tenía una incidencia de 554 a catorce días al haber detectado 1.373 casos en dos semanas. Le siguen Arteixo (495 de incidencia), Culleredo (475), Cambre (463), Oleiros (446), A Laracha (280) y Carral (278).

Vuelven a subir los positivos

En el conjunto de Galicia la incidencia acumulada es de 389 y aunque bajan los casos activos (hasta los 11.572), ayer volvieron a superarse los 700 positivos diarios (706) —por primera vez esta semana— y sube ligeramente la cifra de ingresados: 330, 62 en UCI. El área sanitaria coruñesa logró reducir en casi 200 los infectados (hay 3.648) pero registró 151 nuevos contagios y hay 93 personas ingresadas, 19 en UCI. El Sergas notificó cuatro muertes más, entre ellas una mujer de 30 años de Ourense.