"Hay más que motivos para salir a la calle". Miguel Blanco, secretario general de COAG, reivindica un "plan urgente" de medidas de apoyo al campo porque "nos enfrentamos en estos momentos a una tormenta perfecta". La propuesta de aplicación de la nueva PAC, los bajos precios del campo y la espiral alcista de costes (luz, materias primas o gasóleo) disparan la inquietud de los hombres y mujeres del campo. Y las organizaciones agrarias –COAG, Asaja y UPA– se proponen retomar la unidad de acción para iniciar movilizaciones agrarias en fecha aún por concretar.

El presidente nacional de Asaja, Pedro Barato, ya lo avanzaba en Zamora el pasado viernes con motivo del X Congreso donde salió proclamara la nueva dirección regional con Donaciano Dujo a la cabeza.

Un día antes, el Comité Ejecutivo nacional de Asaja había aprobado la convocatoria de movilizaciones con carácter nacional en protesta por el Plan Estratégico de la PAC 2023-2027 que prepara el Ministerio de Agricultura y que el propio ministro Planas ha anunciado su intención de tener cerrado antes de que finalice el año. Un plan al que, "como ya ocurriera con el acuerdo sobre la PAC alcanzado en Bruselas a finales del mes de junio, le sobra ideología y le falta agronomía" sostiene Asaja.

El modelo productivo agrario diseñado en el Plan Estratégico del ministerio que dirige Luis Planas, y que cuenta ya con el visto bueno de algunas Comunidades Autónomas –no con el de las organizaciones agrarias– tiene, según Asaja, "graves errores de planteamiento ya que no se puede exigir a los agricultores y ganaderos que con los mismos, o incluso menos fondos, afronten exigencias mucho mayores a la hora de producir".

Miles de familias ven con enorme preocupación cómo los productos no alcanzan el valor justo

Para esta organización "es prioritario afrontar los retos que se avecinan con medidas que acompañen a los agricultores y ganaderos profesionales para que puedan responder a estas nuevas exigencias con garantías de éxito, viabilidad y rentabilidad. Deben arbitrarse medidas de apoyo al relevo generacional, estructuras e infraestructuras en el medio rural, reducción generalizada de los costes de producción, equilibrio de la cadena agroalimentaria y refuerzo del eslabón del productor en la formación de valor, reciprocidad en las relaciones comerciales, acceso a la innovación y tecnología agraria y reconocimiento de la actividad agraria ante el consumidor y la opinión pública".

Por su parte, la Comisión Ejecutiva de COAG planteará en el Pleno de mañana a las uniones regionales la convocatoria de un proceso general de movilizaciones agrarias, dentro de un marco de unidad de acción con Asaja y UPA. "Si se aprueba el Plan Estratégico Nacional, sobre la base de los términos planteados por el Ministerio de Agricultura, el agricultor profesional sería el gran perdedor de la aplicación de la nueva PAC en España", advierte COAG.

Esta organización advierte de las consecuencias de la subida de la luz en el sector. "Los beneficios caídos del cielo de las eléctricas ponen los costes de producción del campo por las nubes". Y advierten del impacto en el periodo agosto-septiembre, cuando los precios de la electricidad están disparados. "De momento, los regantes han visto su factura multiplicada por seis desde abril".

Una explotación familiar con 80 vacas ha pasado de pagar 480 euros de luz a 600 en cuestión de un mes

Más dramático es para la ganadería de leche, cuya factura de la luz se estima que se ha incrementado "un 60% de media". Una explotación familiar con 80 vacas, advierte COAG, "ha pasado de pagar 480 euros de luz a 600 en cuestión de un mes. Y es que una explotación ganadera hoy en día cuenta con tecnología que supone un alto coste energético (motores de ordeñadoras, ventiladores y el tanque de refrigeración de la leche, que no entiende de ahorro ni de elegir los horarios más económicos)".

Desde la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) se denuncia cómo "estos días, miles de familias ven con enorme preocupación, con desesperación incluso, cómo los productos que elaboran con mimo, con sudor, esfuerzo e inversiones no alcanzan el valor que deberían tener en el mercado".

En cuanto al planteamiento de la PAC se apuesta por un diseño "más justo, que dirija sus ayudas a quienes más las necesitan y que contribuya al progreso sostenible del medio rural. No podemos permitir que todo siga igual que en los últimos años". Y aunque admite que no es fácil unir posturas, "estamos trabajando con el resto de organizaciones agrarias representativas para elaborar un documento de unidad, donde aparquemos nuestras diferencias y nos centremos en lo que nos une".