La erupción del volcán de La Palma ocupa ahora titulares y telediarios, pero solo los que viven en la isla saben cómo fueron las semanas previas, lo que se siente al notar los temblores y lo impactante que es ver la lava, a lo lejos, desde la ventana de casa. “En la calle solo se oye la palabra volcán. Todo el mundo habla de eso. Al principio me asusté un poco, pero ya estoy más tranquila”, cuenta Mara Cortés, que hace un mes se mudó a La Palma para empezar una nueva aventura en el CB Aridane, equipo de baloncesto que dirige el también coruñés Jorge Carreira.

A ambos les pilló la erupción en Tenerife, donde estaban jugando un torneo. “Ocurrió cuando estábamos a punto de embarcar en el avión para volver a casa, así que cancelaron el vuelo. Hubo momentos de confusión y algunos, incluso, compramos billetes de ferry para ir en barco, aunque al final, sobre las seis de la tarde, pudimos despegar”, recuerda Carreira, que apunta que al aterrizar “no se notaba nada”.

Cortés, en cambio, se planteó quedarse en Tenerife “hasta que la situación se tranquilizase”, pero cuando las autoridades “dijeron que era seguro volar en avión”, no lo dudó. Confiesa que siempre le tiene “respeto” a viajar en avión y, además, “hubo turbulencias”. Pero superó ese miedo y regresó a su casa, desde donde “se ve el volcán”.

La jugadora de baloncesto intentó hacer ayer “vida normal” para desconectar. “Intenté quitarme el volcán de la cabeza porque llevaba observándolo desde la tarde del domingo. Fui a dar un paseo e hice algunas tareas, pero en la calle solo se habla de eso. Como ante con el coronavirus, pues ahora el volcán”, comenta.

Aunque los protagonistas ahora son la lava y todo lo que arrasa a su paso, para el entrenador del CB Aridane “lo peor fueron los días previos a la erupción”. “No sabíamos qué iba a pasar. Los expertos decían que era cuestión de tiempo, pero podían ser tres días o 15 años, así que hubo mucha inquietud”, relata, a la vez que opina que “sería más angustioso seguir dos o tres semanas con terremotos intermitentes”. De esa sensación no se va a olvidar nunca. Tampoco Mara. “Vibraba la calle durante unos segundos”, detalla.

A Cortés le preocupa lo que está por venir, aunque sabe que la lava “no llegará” a la zona donde ella vive. “Nos dicen que, dentro de la gravedad, no es tan peligroso”, apunta. Jorge Carreira informa que “el centro no está afectado, ni hay problemas de luz o agua”, así que está haciendo “vida normal”. “Sí hemos anulado los entrenamientos por solidaridad”, añade.

La jugadora de baloncesto avisa de que “no se sabe cuándo va a parar de expulsar lava y gases”, así que es consciente de que puede llegar el momento de que les desalojen. “Aun no sabemos nada. Yo intento estar pendiente de la información. Pero en Twitter nunca sabes si es verdad o son bulos, así que me informo en las cuentas de las autoridades, como el Ayuntamiento o la policía”, expone.

Carreira, que ha recibido “muchos mensajes de amigos de A Coruña” que estaban “preocupados”, reconoce que ya está “más tranquilo” ahora que sabe que donde vive “no hay peligro”. Ver un volcán en erupción no es algo que se pueda hacer todos los días, así que el entrenador de baloncesto se desplazó hasta un mirador para observarlo. “Estuvimos hasta las cuatro de la madrugada. Había muchísima gente con prismáticos y cámaras de fotos. Te hipnotiza”, concluye el coruñés.

Marta Cortés. // L.O.

Marta Cortés. // L.O.

La Reserva de Biosfera ofrece su apoyo a la isla

La Reserva de Biosfera Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo manifestó ayer su apoyo y colaboración a la Reserva de Biosfera de La Palma, con la que está hermanada desde 2019. Así, pone a disposición de la isla canaria “los recursos que estén a su alcance para colaborar en las posibles actuaciones de recuperación tras la erupción o en cualquier otra cuestión necesaria”, apuntan en un comunicado. “Aunque estemos lejos, lo estamos viviendo muy cerca”, resume el presidente de Mariñas Coruñesas, José Antonio Santiso.

Jorge Carreira, en una excursión por La Palma. |  // L. O.

Jorge Carreira, en una excursión por La Palma. | // L. O.