El Colexio Oficial de Psicoloxía de Galicia acaba de publicar el documento Protocolo postcatástrofe, una guía de actuación e intervención que “de continuidad a los primeros auxilios psicológicos tras un suceso crítico” y que ha reenviado a la Xunta “con la intención de que se pueda articular un mecanismo eficaz” para evitar que se repitan situaciones como, por ejemplo, la explosión de la pirotecnia ilegal de Tui, donde los propios vecinos, recalcan, denunciaron la falta de atención.

El organismo que reúne a los psicólogos gallegos denuncia que tras la actuación del Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias del Colexio —que atiende a víctimas de catástrofes durante las 72 primeras horas— es habitual que estas personas tengan dificultades para poder seguir recibiendo asistencia bien porque no logran cita con un psicólogo del Sergas o bien porque no se les asigna hasta meses después. Esto genera en las víctimas, según apuntan, un sentimiento de desamparo que agrava la sintomatología ya existente y, por tanto, provoca aún un mayor malestar. El objetivo del Colexio es evitar esta situación y por ello lanza esta guía.