La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), solicitó ayer “cautela” ante la decisión de los países nórdicos de suspender la vacunación con Moderna por miocarditis o periocarditis porque lo han hecho en base a resultados aún preliminares de un estudio.

La agencia reguladora española emitió un comunicado para lanzar un “mensaje de tranquilidad” tras la repercusión que ha tenido la decisión de las autoridades sanitarias de Suecia, Finlandia, Dinamarca y Noruega de paralizar la administración de Spikevax por la posible aparición de casos de inflamación cardíaca. Unos efectos adversos que, recuerda la Aemps, ya estaban descritos en la ficha técnica y prospecto del antídoto de Moderna y también los de Pfizer como una reacción “cuya frecuencia de aparición es muy baja”. En concreto, Suecia y Finlandia la suspendieron menores de 30 años y Dinamarca y Noruega en menores de 18 como medida de precaución después de conocer los resultados preliminares de un estudio epidemiológico.