Más de la mitad de los 239 millones de personas a las que se les ha diagnosticado coronavirus desde diciembre de 2019 experimentarán síntomas conocidos como COVID prolongado, hasta seis meses después de recuperarse de la dolencia, según un estudio de los investigadores del Penn State College of Medicine (Estados Unidos) publicado en la revista Jama Network Open.

El equipo de investigadores ha advertido a los gobiernos y a las organizaciones médicas para que estén preparados “para la gran cantidad de supervivientes que necesitarán atención para una variedad de síntomas psicológicos y físicos”. “Estos hallazgos confirman lo que muchos trabajadores de la salud y sobrevivientes de COVID han afirmado, que los efectos adversos para la salud del COVID pueden persistir”, manifestó el coinvestigador principal Vernon Chinchilli.

Los principales síntomas a los que se refieren los investigadores son el cansancio, dificultad para respirar, dolor en el pecho y en las articulaciones y la pérdida del gusto y olfato. En el estudio participaron pacientes no vacunados que se sobrepusieron al coronavirus durante estos meses.