Casi la mitad de los españoles, un 46,2%, considera que se debería obligar a todas las personas a vacunarse de COVID, aunque no quiera hacerlo, frente a un 22,9% que opina que no se puede obligar a nadie a ponerse la vacuna, según el último barómetro del CIS.

Además, según la encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas, un 27% asegura que esa obligación de vacunarse dependería de los casos. No obstante, entre aquellos que piensan que no debería obligarse a todo el mundo a vacunarse o que tienen dudas, sí creen mayoritariamente —un 67,3%— que el personal sanitario, que trabaja en residencias de mayores o directamente de cara al público, debería inmunizarse por ley.

Del total de encuestados por el CIS, un 4,8% confiesa que aún no se ha vacunado y, de los que lo han hecho voluntariamente, el 28% asegura que es porque “no se fía de las vacunas”, un 17,1%, por miedo a los efectos secundarios, y un 10,1%, porque considera que no son eficaces.