El Gobierno italiano aprobó ayer un decreto que entre otras cosas refuerza el uso del certificado sanitario, excluyendo a los no vacunados del ocio (bares, estadios y cines, entre otros lugares), e impone la vacunación a policías y profesores.

Italia registró ayer 13.764 nuevos casos de coronavirus en 24 horas —frente a los más de 12.400 del día anterior— y 71 fallecidos, lo que aumenta el balance provisional de muertos a 133.486 desde febrero de 2020.

Los habitantes de las ciudades de Milán, Aosta, Bolonia, Bérgamo y Padua, todas en el norte de Italia, deberán usar la mascarilla en el centro durante las Navidades para prevenir los contagios.

Además, las regiones del Lacio, cuya capital es Roma, y del Véneto pidieron al Gobierno que exija a la gente llevar esta protección en el centro de todas las ciudades y en los mercadillos callejeros, que concentran aglomeraciones en las fechas festivas.