Las secuelas del COVID se mantienen en la sanidad. Las listas de espera siguen sin recuperar las cifras con las que el Sergas cerraba el año 2019, el último antes de que la pandemia hiciese irrupción. Aunque durante el primer semestre de este año la media de días que tiene que esperar un gallego para ser intervenido en una cirugía se ha reducido con respecto a la que se registraba a finales del pasado año, al situarse en 75,3 días si se incluye Povisa y 75,6 si no se contabiliza el centro vigués, el dato supone veinte días más que el de finales de diciembre de 2019, cuando se situaba en 54,5 días.

Las listas de espera consultadas por Europa Press reflejan también cómo donde tienen que armarse de más paciencia para entrar en quirófano es en el área sanitaria de Ferrol, con 84,6 días, casi un mes más que la situada en el extremo opuesto: Lugo-A Mariña-Monforte, con 56,8 días de espera media.

Si lo que se analiza es cuánto tarda una consulta con el especialista, la demora alcanza los 54,8 días, y en este caso el dato es superior tanto al anotado antes de la pandemia, cuando era trece días inferior, que a finales de 2021, cuando suponía doce días menos. En este indicador también hay diferencias sustanciales en función de qué área sanitaria se trate: en Lugo, por ejemplo, casi llega a los 82 días, poco menos de tres meses.

La Consellería de Sanidade ya contaba con que 2022 no bastaría para recuperar los niveles de actividad prepandemia. A pesar de que para 2021 se anunció un plan de choque dotado con 15 millones de euros con la intención de desatascar todo lo que el COVID había obligado a aplazar y se aliviaron las esperas con respecto a 2020, los planes del Sergas para este ejercicio contemplaban medias superiores a la prepandemia. En todo caso, el objetivo de los acuerdos de gestión era que los pacientes pudiesen entrar a quirófano antes de 67 días y que la demora por una consulta se situase por debajo de los 40.

Los gallegos que esperan se han incrementado. En total, constan en Galicia 46.553 personas pendientes de una intervención quirúrgica. Suponen casi 3.400 pacientes más en comparación con los datos del segundo semestre del pasado año.

Si bien el grueso de los casos tiene que afrontar demoras que no superan los tres meses, constan en los listados más de tres mil personas —2.783 en el caso de Povisa y otras 331 en los hospitales públicos gallegos— que aguardan más de un año para entrar en quirófano. Por especialidades quirúrgicas, los que más tardan en llegar al quirófano son los pacientes de traumatología, más de 1.900 personas, con 123 días de media.

No ocurre así, no obstante, con aquellos enfermos con patologías que se engloban en las de prioridad 1, una lista que integran casi dos mil gallegos. En esos casos, el tiempo medio para la intervención se sitúa en 18,6 días. Otros 11.761 pacientes integran el grupo de prioridad 2, y en ese caso la espera media asciende a 74 días.

En cuanto a las consultas con especialistas, 198.323 citas están a la espera. También en este caso la mayoría se solventa antes de tres meses, pero casi 600 aguardan más de un año. Lo que más tarda es una cita con neurocirugía (149 días); lo contrario sucede en radioterapia, con 2,2, y obstetricia.