Cientos se personas protestaron este martes en Madrid y Barcelona por la muerte de la joven kurda Mahsa Amini hace once días, tras ser detenida por la policía de la moral iraní, que consideró que llevaba mal puesto el velo obligatorio.

En Madrid, varias decenas de personas, en su mayoría mujeres iraníes, se concentraron delante del Congreso de los Diputados, convocadas por la Asociación Pro Derechos Humanos Iraní en España.

Los participantes colocaron rosas sobre fotografías de víctimas de la represión del régimen iraní, mientras se coreaban cánticos como "Mahsa somos todas", "la policía de la moral, la vergüenza de Irán" y "abajo la teocracia, arriba la democracia".

Desplegaron una gran pancarta con el lema "Solidaridad con las protestas populares contra la república islámica", rodeada de varias banderas de Irán y del Kurdistán.

La presidenta de esa asociación, Fariba Ehsan, pidió a los españoles que "estén al lado del pueblo iraní para poder seguir en la lucha".

En la ciudad de Barcelona (noreste), cientos de personas, mayoritariamente mujeres también, se concentraron en la plaza de Plaza Sant Jaume para exigir libertad en Irán.

Llevaban banderas, algún velo blanco ensangrentado y gritaban lemas como “mujer, vida y liberad”, “viva Irán y vivan las mujeres”, o “que se vaya el dictador", en alusión al presidente de Irán, Ebrahim Raisi. Algunas de las mujeres se cortaron mechas de pelo en señal de protesta.

“El caso Amini es la chispa que ha hecho que el pueblo iraní, con la ideología o religión que tenga cada uno, se una”, dijo a EFE Katy Evoghli, una mujer iraní.

También estuvo presente Malalai Joya, exdiputada afgana que tuvo que huir de su país por defender los derechos de las mujeres frente al régimen talibán.

"Tenemos muchas cosas en común por las que luchar y estamos felices de que los iraníes se hayan levantado contra el régimen islamista", declaró a EFE.

La muerte de Mahsa Amini desencadenó fuertes protestas ciudadanas en varias partes del mundo y en el propio Irán, donde 41 personas murieron en los disturbios y 1.186 fueron detenidas, según las autoridades.

Sin embargo, la portavoz de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani, aseguró este martes que son al menos 76 fallecidos, según datos fiables de una ONG.