La vuelta al cole, el fin de las medidas antiCOVID y la llegada del otoño han duplicado las urgencias en el Hospital Materno Infantil Teresa de A Coruña (Chuac), que estos días registra un “pico” de demanda “adelantado” con respecto a años anteriores, aunque la mayoría de esas atenciones se deben a “cuadros infecciosos leves, banales, que se pueden manejar de forma ambulatoria” y que no se traducen, por tanto, en un aumento de la hospitalización.
“En las últimas semanas, venimos registrando un pico de incidencia, aproximadamente se duplicó la asistencia de pacientes pediátricos a nuestro servicio con respecto a los meses de agosto y septiembre, y creemos que el origen de este aumento de la demanda es multifactorial: el regreso de los niños a las guarderías y a los colegios, que las medidas antiCOVID son más laxas y, todo esto, sumado al rebrote habitual propio de la estacionalidad, que se ha adelantado con respecto a años previos”, explica Iván Presno López, médico adjunto de las Urgencias de Pediatría del Materno, quien resalta que este incremento de las urgencias pediátricas en el centro de As Xubias no ha repercutido en los ingresos, puesto que “la mayor proporción de los pacientes pediátricos” que están viendo estos días en Urgencias “presentan cuadros infecciosos leves, de tipo vírico en su mayoría”.
“Los niños son un reservorio de virus y, al volver a los centros de enseñanza, se están contagiando unos a otros, y es lo que estamos viendo. Cierto es que el pico de estos días quizás es más propio de los meses de noviembre y diciembre, y este año se ha adelantado un poco, no obstante, en otoño e invierno siempre sube la carga asistencial”, reitera.
Hace apenas un par de semanas, coincidiendo con el inicio de la vacunación contra la gripe de los niños de 6 a 59 meses (incluidos por primera vez, este año, entre los grupos prioritarios de inmunización), la presidenta de la Asociación Gallega de Pediatría de Atención Primaria (AGAPap), Amparo Rodríguez Lombardía, aseguraba en este diario que los pediatras de los centros de salud estaban viendo ya, en sus consultas, “muchísimos cuadros virales”.
“Pasamos de estar con el COVID y no ver absolutamente nada más, a atender muchos más cuadros virales leves, dolor de garganta, fiebre, influenza, laringitis... sobre todo, en niños mayores. Lo que sucedía antes de la pandemia, pero ahora es como si el sistema inmune de esos pequeños fuese un poquito más lento, como si no estuviese respondiendo igual antes. Al menos esa es nuestra sensación”, refería la doctora Rodríguez Lombardía, aunque incidía en que, por ahora, se trataba de “casos leves”. “De gripe también, aunque este año parece que el virus causante de esa dolencia hubiese perdido la estacionalidad”, advertía.
Sobre esta cuestión, el doctor Presno López especifica que buena parte de los pequeños que llegan a Urgencias, con cuadros respiratorios víricos, “presentan síntomas compatibles con la gripe” y, desde su punto de vista, esto forma parte también de la “vuelta a la normalidad previa al COVID”. “Muchos de nuestros pacientes son niños de muy corta edad, que han pasado los primeros años de su vida en una especie de ‘burbuja’ debido a la pandemia. La situación que vemos ahora entra dentro de lo normal”, apunta este facultativo, quien avanza que la previsión, de cara a las próximas semanas, es que “se mantenga esta elevada afluencia” en su servicio y, en este contexto, aconseja “vacunar contra la gripe” a los pequeños de 6 a 59 meses, “porque muchos de los cuadros clínicos” que están viendo “son secundarios” del virus causante de esa infección, “para disminuir su incidencia en la población infantil” y, sobre todo, “para proteger a los más vulnerables”.
