Greenpeace ha organizado este viernes una protesta en pleno centro de Madrid para quejarse del consumismo que alientan las grandes marcas y para ello ha construido cuatro montones de desperdicios y residuos en referencia a los que generan estas grandes corporaciones durante el 'Black Friday'.

“Hecho para tirar” ha sido el lema de la reivindicación, que han colgado en la plaza Callao por la entrada de la calle Preciados; ahí, han levantado cuatro montones, cada uno en representación de un residuo: los plásticos y los cartones para denunciar los embalajes de los productos, los textiles y los residuos electrónicos.

Los manifestantes, que se han subido sobre estos montones de desechos e incluso a los balcones de la calle, portaban pancartas que rezaban: “Las marcas nos están consumiendo”, “Black Friday destruye el planeta” o “Sus beneficios, tus desperdicios”.

La responsable de biodiversidad de Greenpeace, Celia Ojeda, ha explicado a EFE que el blanco de la protesta no son las personas consumidoras, sino la sobreproducción de las grandes marcas que incitan el consumismo a través de productos de "menor duración y peor calidad", que terminan "en vertederos e incineradoras".

Por esta razón, ya no solo se manifiestan contra la materia prima que se precisa para esta elevada producción, ha explicado Ojeda, sino también por la contaminación que las empresas generan y los desperdicios y desechos que más tarde suponen.

Asimismo, ha denunciado que el "Black Friday" supone un "pico del momento consumista" que "acaba reflejando un alto coste ambiental", tanto en la contaminación del aire y del agua como el uso del suelo y la pérdida de biodiversidad.

Así, desde Greenpeace aseguran que cada año van a parar a vertederos en torno a 990.000 toneladas de productos textiles en España, de los que se recicla entre el 10 y el 12 %.

Por todo ello, han reclamado al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) que vele por el cumplimiento del artículo 18.2 de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular, que cita: "Queda prohibida la destrucción o su eliminación mediante depósito en vertedero de excedentes no vendidos de productos no perecederos tales como textiles, juguetes o aparatos electrónicos, entre otros", salvo que deban destruirse por motivos de seguridad.

La acción ha comenzado a las nueve de la mañana, y una hora más tarde han llegado la Policía municipal y los bomberos, que han acordonado la zona y han comenzado a desalojar a los protestantes.