Farmacéuticos de A Coruña estiman que el desabastecimiento de medicinas “irá a más”

“El desabastecimiento de fármacos se ha agudizado en los últimos años, pero quizás ahora tenemos un problema más serio. La alerta saltó con antibióticos infantiles, pero hay otras medicaciones afectadas, tanto para niños, como para adultos”, advierte Paula Briones, integrante de la junta de gobierno del Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña (COFC), con farmacia en la avenida de Arteixo, sobre la falta de suministro de medicamentos, un problema “endémico” que se ha disparado casi un 170% en los últimos cuatros años y que en España afecta, en la actualidad, a más de 670 fármacos.

“Con respecto a los antibióticos infantiles —especifica—, existen muchos problemas en presentaciones pequeñas, y precisamente hoy [por ayer], en todos los laboratorios, salvo en uno, hay suministro irregular. Y lo que nos transmiten es que, de aquí en adelante, la situación no va a mejorar mucho”, refiere Briones, quien apunta, entre las causas del desabastecimiento de fármacos, “por un lado, el problema de las materias primas y, por otro, el precio de la medicación”.

“En España, los medicamentos son muy baratos y los laboratorios desvían su reparto a otros países donde realmente les pagan más. Hay que pensar que si, por ejemplo, una caja de ibuprofeno de 40 comprimidos cuesta 1,97 euros, cada pastilla son 5 céntimos... a día de hoy, no sé qué se puede comprar por ese importe. Probablemente, a la hora de elaborar los materiales de acondicionamiento, los laboratorios tendrán problemas para adquirir esos productos, pero también es cierto que muchos desisten de fabricarlos ellos mismos porque les compensa la venta en otros países”, reitera.

“Hasta ahora”, explica Briones, las farmacias han ido “solucionando” estos problemas de suministro “con genéricos, y con otras medicaciones similares”. “Solicitamos hablar con el facultativo que ha pautado el fármaco en cuestión, y le pedimos que haga el cambio. No obstante, a día de hoy, al no tratarse de algo aislado y al haber ya muchos medicamentos en desabastecimiento, cada vez tenemos más problemas”, admite la integrante de la junta de gobierno del COFC, quien considera que “no estaría de más” que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), dependiente del Ministerio de Sanidad, “habilitase” a los boticarios para “sustituir la forma farmacéutica de medicamentos con el mismo principio activo”. Algo que solo se ha autorizado, “en un hito sin precedentes”, para la amoxicilina, en cuyo caso los boticarios pueden cambiar “no solo la forma farmacéutica, sino también la dosis”.

“En estos momentos, la base de datos de medicamentos de prescriptores y farmacias no coinciden, de modo que, muchas veces, los facultativos desconocen algunas faltas de suministro, mientras que los farmacéuticos disponemos de esa información actualizada a tiempo real. Si la Aemps nos permitiese a nosotros hacer el cambio en la forma farmacéutica, dentro del mismo principio activo, o si las farmacias tuviésemos un canal directo con el prescriptor como medida de emergencia en estos casos, se evitaría a los pacientes el trastorno de tener que volver a la consulta de su médico a por una nueva receta”, resalta.

Briones insiste en que el desabastecimiento “no afecta solo a antibióticos” a día de hoy, sino que “son muchas otras” las medicaciones con falta de suministro, y asegura que la previsión de los laboratorios es que el problema vaya “en aumento”.

“En estos momentos, hay mucha preocupación por distintos medicamentos, no solo por los antibióticos. Desde medicaciones para la epilepsia, para pacientes con patologías psiquiátricas, para diabéticos, para llevar a cabo algún tratamiento de fertilidad... la problemática, en esta ocasión, nos toca a todos por igual”, subraya la integrante de la junta de gobierno del COFC.

Ante esta tesitura, y para evitar el “peregrinaje” de los pacientes de un establecimiento a otro en busca de una determinada medicina en desabastecimiento o con problemas de suministro, farmacias de toda España —también coruñesas— recurren “con frecuencia” a una plataforma, FarmaHelp, que les ayuda a localizar en qué boticas puede estar disponible el fármaco en cuestión.

“Nos está siendo de gran utilidad, ya que nos permite marcar un perímetro alrededor de nuestra farmacia y lanzar un llamamiento sobre la medicación para dirigir a los pacientes al establecimiento más cercano en el que la puedan tener en stock”, explica Briones, quien estima que, llegados a este punto, “todos deberíamos cambiar un poco el chip”. “Ya no es tanto el ‘voy a la farmacia y quiero que me vendan el genérico X, que es el que estoy habituado a tomar’, sino que, en estos momentos, con una probabilidad muy alta, te tendrán que dispensar el genérico que en ese momento esté disponible en el mercado. Este es un cambio al que nos tendremos que adaptar si la actual situación (como todo parece apuntar) se recrudece”, remarca.

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