Un colegio balear dejará de separar a niños y niñas en clase para no perder las ayudas públicas

El colegio Aixa-Llaüt de Palma, centro vinculado al Opus Dei y el único de Mallorca que todavía separa a sus alumnos por sexos, ha tomado la decisión de empezar a integrar a niños y niñas en la misma aula para conservar el concierto educativo de 2,4 millones de euros que tiene con el Govern y que vence este curso. Sin embargo, la idea de este centro es empezar a integrar a niños y niñas de manera progresiva durante los próximos años y Educación no le concederá un nuevo concierto si no completa todo el proceso de cara al curso 2023-24. 

"La propuesta que hacen es incorporar de manera progresiva la educación mixta. Plantean empezar en primero de primaria el curso 2023/24 e ir subiendo un curso cada año, pero manteniendo una serie de años los cursos que todavía separan a los alumnos por sexo. De acuerdo a una consulta que hicimos a la Abogacía de la Comunidad les hemos dicho que eso no es posible. La única condición que les ponemos para mantener todas las unidades concertadas es que en el curso 2023/24 no separen los alumnos por sexo en ningún de los niveles educativos", ha explicado esta mañana Antoni Morante, director general de Planificación, Ordenación y Centros. 

"Ellos no están de acuerdo y nosotros nos reafirmaremos en la denegación del concierto", ha añadido Morante después de la reunión de la comisión de conciertos educativos en la que Govern, patronales y sindicatos han abordado un posible cierre de aulas en centros concertados que no llegan a las ratios mínimas de alumnos por el descenso de la natalidad. 

El centro Aixa-Llaüt, ubicado en el Parc Bit, ya incorpora la educación mixta entre los 0 y los 6 años. "Lo que hemos propuesto es que los alumnos que actualmente están en el último curso de Educación Infantil pasen a primero de Primaria en aulas mixtas. De este modo queremos mantener el concierto y que las familias no tengan que buscar otras opciones", señaló Vicky Ferrer, directora del centro Aixa-Llaüt. 

"No son cromos"

"Queremos acatar la ley, pero pedimos una progresividad. Nos parece lo más justo porque estamos hablando de niños, no son cromos que se pueden cambiar. Hagamos las cosas bien", reclamó Ferrer.

El centro se debate entre conservar su modelo educativo y perder unos ingresos fundamentales con los que, entre otras cosas, se pagan las nóminas de los docentes. "Los padres confían mucho en nosotros. Estamos muy cerca de las familias, tenemos un trato muy personalizado y lo que desean es que defendamos su derecho a elegir la educación que quieren. Ese es nuestro compromiso con ellos y lo queremos mantener", manifestó Ferrer, consciente de que se encuentran en una encrucijada. «Respetamos todas las opiniones, pero pensamos que tenemos derecho a mantener el modelo educativo que tenemos», indicó la directora del Aixa-Llaüt. "Las cosas pueden cambiar de aquí a septiembre. Hay varios escenarios abiertos y los estamos estudiando", concluyó esta profesional.

En un breve comunicado, el colegio expresó su voluntad de "acatar la legalidad vigente" abriendo la educación mixta a los alumnos que el próximo curso estarán en primero de Primaria. "Esta decisión la hemos tomado para evitar un daño irreparable a todas aquellas familias que han escogido nuestro proyecto educativo", añadió.

La sentencia del TC es el principal argumento que esgrime la conselleria de Educación para informar desfavorablemente del concierto. Y un revés para el Aixa-Llaüt, que hasta ahora había podido compatibilizar su modelo de segregar en las aulas con el concierto gracias a dos sentencias firmes del Tribunal Superior de Justicia de Balears y del Supremo.

El Tribunal Constitucional avaló hace unos días la constitucionalidad del apartado de la LOMLOE que establece que los los centros sostenidos total o parcialmente con fondos públicos deben aplicar el principio de coeducación y no separar a los alumnos por sexo en ninguna de las etapas educativas.