Más de 20 médicos gallegos se suman al plan de Escrivá para compaginar pensión y trabajo

Casi cuatro de cada diez médicos de familia gallegos están al borde de la jubilación. Es una de las especialidades que más acusa el déficit de profesionales. Y aunque se han incrementado las plazas para formar a más facultativos, deberán aún pasar varios años para que terminen su residencia y se puedan incorporar. Mientras tanto, la solución pasa por alargar la vida laboral de los que están en activo. La Xunta ha reclamado al Gobierno que amplíe hasta los 72 años la edad hasta la que pueden seguir trabajando los doctores en los centros de salud. Por su parte, el Ministerio de Inclusión Social, junto al de Sanidad, ha lanzado un plan para persuadir a los médicos de que no cuelguen la bata cuando les toque retirarse. Les ofrece la opción de compaginar su salario íntegro con el 75% de su pensión. Y en Galicia ya se han apuntado 23 profesionales desde principios de abril.

Se trata de un proyecto piloto, que se prolongará durante tres años, y que pretende aliviar la carencia de médicos de familia y pediatras en Primaria. Se trata de apostar por la jubilación activa, es decir, que los profesionales que se retiren puedan seguir trabajando a jornada completa o parcial. Aunque el plan se aprobó a finales de diciembre no estuvo operativo hasta la pasada Semana Santa. Desde entonces se han apuntado 171 médicos en toda España y el 14% son gallegos.

La edad legal para poder jubilarse se sitúa ahora en los 66 años y los 4 meses, aunque si el trabajador tiene 37 años y 9 meses cotizados puede retirarse ya a los 65 años. En todo caso, no es obligatorio dejar la vida laboral y los médicos pueden continuar trabajando hasta los 70 años. Según el Sergas, actualmente más del 80% de los facultativos ya optan por aplazar su jubilación y ha reclamado al Ministerio de Sanidad que les permita continuar en activo hasta los 72 años.

En todo caso, la sobrecarga que sufren los médicos de familia puede desanimarlos a seguir trabajando una vez cumplan los años a los que pueden jubilarse. Y ahí es donde entra el plan diseñado por el departamento de José Luis Escrivá en colaboración con el Ministerio de Sanidad. Se trata de incentivar la jubilación activa mediante jugosos incentivos.

Los médicos que llegados a la edad legal de jubilación, continúen trabajando seguirán cobrando la totalidad del salario, pero además sumarán el 75% de la pensión. Pero tienen otra opción: seguir en activo pero solo a media jornada. En este caso, recibirán la mitad del salario y también el 75% de la pensión. A diferencia del sector privado, en el que los médicos tienen diversas posibilidades de prolongar su vida laboral más allá de la edad ordinaria para retirarse, en el sector público no está permitida la jubilación activa y la parcial es imposible en la práctica por no estar desarrollada reglamentariamente para los funcionarios ni para el personal estatutario.

El ministro Escrivá explicó que el objetivo del programa es “hacer frente a un déficit temporal de estos perfiles profesionales por la próxima jubilación de promociones de médicos particularmente numerosas de los años ochenta”.

Según el estudio del Ministerio de Sanidad que analiza la Oferta-Necesidad de Especialistas Médicos 2021-2035, en un horizonte de cinco años el Sergas puede quedarse sin el 40 por ciento de sus médicos de familia. Un millar de facultativos que trabajan en Atención Primaria tienen más de 60 años, de manera que podrán jubilarse a partir de 2027.

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