Investigadores gallegos descubren un mecanismo esencial en la aparición de la diabetes tipo 1

Averiguan que las células autorreactivas que la causa están también en personas sanas

Iria Gómez, tercera por la derecha, con su equipo del CiMUS.

Iria Gómez, tercera por la derecha, con su equipo del CiMUS. / LOC

Koro Martínez

Con una hipótesis de partida en base a la cual la respuesta inmunitaria de los pacientes a la proteína TCR del páncreas en casos de diabetes tipo 1 «era de una forma concreta, mientras que en los sanos no hay respuesta autoinmunitaria», cuando empezaron con la investigación en 80 personas comprobaron que «los datos te derrumban esa hipótesis y sale algo totalmente distinto, inesperado». Así es como define la investigadora Iria Gómez Touriño el resultado del trabajo llevado a cabo por el Grupo de Inmunidad y Pequeñas Moléculas del CiMUS de la USC, en colaboración con King’s College London y Technische Universitat Dresden, y que acaba de ser publicado en la revista internacional Nature Communications. Un trabajo que busca comprender qué características tienen las proteínas TCR y qué provoca un reconocimiento equivocado de autoantígenos originando la destrucción de células pancreáticas que producen insulina.

El resultado, según explica, pone en duda «el dogma de que la gente sana no tiene células autorreactivas y los enfermos sí, igual no es tan blanco o negro y es más como decimos aquí, que depende del antígeno». De ahí que apunte a la necesidad de estar vigilantes, y cree que el resultado del estudio tiene implicaciones «para que quienes estudien enfermedades autoinmunitarias tengan en cuenta que puede existir una respuesta autoinmunitaria fisiológica que hay que distinguir de la patogénica, y también a nivel clínico».

Gómez Touriño resalta la importancia en este proyecto del estudio de un órgano desconocido para la inmensa mayoría de los mortales, el timo. «Es un órgano importante que se descubrió hace unos setenta años», y que describe como el centro de formación del sistema inmunitario, de los linfocitos T «que son los que en el timo se entrenan para distinguir lo que es un antígeno de un virus, de una bacteria, de forma que una vez salgan de ahí y circulen por el cuerpo no se confundan». Como su hipótesis de que del timo solo salen células que ven proteínas propias en la gente enferma no se correspondía con la realidad porque «vimos que también salen en gente sana, nuestra propuesta es que el páncreas es un órgano que al nacer necesita morirse».

Todo ello dentro de un proceso en el que se genera «una respuesta autoinmunitaria normal, beneficiosa, que ayuda a tener un páncreas sano, mientras que en pacientes esa reparación no debe de ser correcta, se genera una memoria incorrecta y entonces no se cierra el ciclo».

Con la publicación del estudio también se da a conocer «una base de datos en la que cualquier investigador los puede descargar de una manera sencilla y utilizarlos», recalca la investigadora del CiMUS.

Recuerda que ya se hizo igual con un estudio anterior, «utilizaron los datos que habíamos recabado y encontraron cosas diferentes de lo que nosotros habíamos querido buscar, pero que les sirvieron igualmente para sus investigaciones».

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents