«Soy menos racista que Gandhi»

La cacería de Hollywood contra Karla Sofía Gascón (Madrid, 1972) no ha podido con ella. Pese a los insultos y las críticas desatados por los tuits racistas y xenófobos que publicó entre 2019 y 2024, la actriz se ha mantenido en pie. Ayer lo demostró en una comida en Madrid en la que presentó su libro Lo que queda de mí, que publica la editorial Almuzara y que llegará a las librerías el próximo martes.

«A mí no me tiene que perdonar nadie nada, a no ser que sea alguien que se sienta aludido sobre las cosas que he podido hacer en mi vida. Que venga entonces y me lo explique. He visto una hipocresía tremenda de gente que salía a criticar algo haciendo lo mismo que criticaba. He visto a muchas personas hablando de mí sin conocerme. Diciendo que si soy una señora de Vox, que si soy racista... Simplemente porque han preferido creer eso», dijo la actriz y también escritora durante un almuerzo con periodistas. «Soy menos racista que Gandhi y menos de Vox que Echenique», dijo.

«Me gustaría saber qué dijeron ciertas personas que me criticaron tras los atentados del 11-M. Yo solo he comentado noticias, y no voy a permitir que nadie diga que blanqueo el nazismo. Me parece una tontería. Pero si lo hubiera intentado explicar durante la vorágine habría sido imposible. No quería dar de comer a este odio. No tenía sentido. Daba igual lo que dijera, porque todo aquello iba a seguir por el mismo camino. Cuando alguien tiene una idea de ti, ya da igual lo que hagas».

En relación a los comentarios racistas que expresaban aquellas publicaciones en redes sociales, «de las que ni me acordaba», admitió que «podían ser no justas con ciertas personas. A los musulmanes los respeto, pero no el terrorismo ni los fanatismos. Por desgracia, en España hemos vivido muchos problemas con estas cuestiones. Y tú como ciudadano reaccionas a las noticias. Igual que yo he visto reaccionar a los demás a las cosas que salían sobre mí». Lo que queda de mí no es exactamente, según su autora, «una biografía, «porque lo escribí a partir de momentos que son de ficción y por eso le toca al lector averiguar lo que es verdad y lo que no». Reconoce que escribirlo no fue fácil. «Hubo momentos en que no podía seguir, porque era muy doloroso, puso en él toda mi alma».

El libro fue editado en su momento en México e iba a ser publicado en España por Dos Bigotes, editorial que se bajó del proyecto al conocerse los tuits de Gascón y desatarse la increíble tormenta que acabó afectando a la carrera de Emilia Pérez a los Óscar y a sus posibilidades de conseguir la estatuilla a mejor actriz (que fue para Mikey Madison). Se centra en la etapa de su vida en la que llevó a cabo su transición. «Un momento difícil en el que, como ahora, me encontré en una situación complicada. Todo se derrumbó a mi alrededor».

Cuenta la actriz que ya ha escrito tres libros y está trabajando en el cuarto. «No dejo que nadie escriba por mí —precisa—. Escribo igual que hablo. Le pongo mucha pasión y no me gusta recrearme en lo que hay alrededor, me gusta ser directa», dice, asegurando que este le parece «un libro maravilloso». «No es una biografía porque no hay ningún nombre que sea real. Mi historia personal, amorosa, es complicada, no escarmiento. Por eso la vida siempre me pone en los mismos sitios, para que siga aprendiendo. El libro parte de la base de que entonces estaba en una relación complicada con una senadora de la República de México. Y tiene elementos muy interesantes relacionados con la política, con cómo viví todo aquello... Cosas que fueron muy difíciles».

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