Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

La ingesta de los microplásticos altera el microbioma

Su acumulación en el estómago afectaría a la flora, según un estudio

V. R.

Barcelona

La ciencia ya ha demostrado que los microplásticos se encuentran en prácticamente todos los órganos de nuestro cuerpo, desde el cerebro hasta los pulmones, pasando por el torrente sanguíneo y las células reproductoras como los óvulos y el semen. Pero lo que no han logrado aún aclarar los expertos es su efecto sobre nuestra salud a corto, medio y largo plazo.

Un equipo austriaco de investigadores ha llevado a cabo un estudio experimental para evaluar el impacto en nuestro microbioma y, según afirman, por primera vez se ha podido demostrar que los microplásticos producen una clara alteración en los microorganismos que viven en nuestro intestino. «Hemos hallado un impacto similar al de la depresión», afirman los expertos.

El estudio, presentado esta semana en el principal congreso europeo de gastroenterología, forma parte un proyecto internacional conocido como microONE que trabaja para entender cómo las partículas micro y nanoplásticas interactúan con el cuerpo humano y qué consecuencias podrían tener para la salud. En este caso, un equipo austriaco de científicos liderado por Christian Pacher-Deutsch tomaron muestras de heces de cinco voluntarios sanos y recrearon en condiciones de laboratorio su microbioma intestinal. A continuación, introdujeron cinco tipos comunes de microplásticos en concentraciones equivalentes a las que se estima que ingerimos a diario a través de los alimentos, el agua o el aire. Y a partir de ahí, estudiaron sus efectos.

Tracking Pixel Contents