'Quemados' por el olvido

El pasado sábado, el fuego provocó una tragedia en el tercer piso del número 13 de la calle Volturno, en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón. Una niña de cuatro años falleció víctima de las llamas que arrasaron su vivienda, de las que su hermano de seis años se salvó milagrosamente gracias a la intervención de unas vecinas. Sin embargo, el triste incendio afectó también a más personas, que sufren su propia tragedia eclipsada por otra de mayores proporciones.

Es lo que le sucedió a una familia gallega que, a la vuelta de las vacaciones navideñas, se encontró con que no podía entrar en su casa. La madre, el padre y el hijo menor se encontraban ausentes el día del incendio pero en la vivienda estaban los dos hijos adolescentes del matrimonio, aunque afortunadamente pudieron huir "en pijama", ya que ya estaban despiertos cuando a las 11.00 de la mañana saltó la alarma por el fuego. "Pudo haber sido peor", confesó su madre, que denunció que, aunque ellos no sufrieron ninguna muerte, también han sido víctimas de la tragedia, y que nadie se ha preocupado de su situación. "Llevamos cinco días de hotel, que estamos pagando de nuestro bolsillo, y ni las instituciones ni nadie nos han dicho cuándo podemos volver al edificio ni si se van a hacer cargo de nuestra situación", denunció.

"Sólo quiero que me dejen mi casa tal y como estaba", lamentó esta mujer que, aunque aseguró ser "consciente" del sufrimiento de la familia de la niña fallecida, denunció que su familia también ha sido "víctima" de unas circunstancias que no han buscado, y que les han llevado a perder su vida normal. "Mis hijos están aún en estado de shock, y nadie nos ha ofrecido ayuda psicológica ni se ha preocupado de nosotros", añadió.