Cuatro largos días con sus respectivas noches, por el momento sin resultado alguno, es el balance de la ininterrumpida búsqueda de Laura Alonso Pérez, la joven de 19 años vecina de Xestosa, en la localidad ourensana de Toén, que desapareció la madrugada del domingo.

Su novio y sus amigos la vieron por última vez en un bar de A Valenzá, local en el que se despidió de ellos sobre la una y media para dirigirse en su coche al domicilio familiar. Una hora y cuarto después su pareja sentimental recibía un mensaje de móvil en el que la joven le comunicaba que ya había llegado a casa, pero la realidad es que nunca llegó a su destino. Pasadas las tres de la mañana su novio recibió una llamada desde el móvil de Laura, a la que no respondió porque estaba durmiendo y tenía la tranquilidad, tras recibir el sms citado, de que su chica ya estaba en casa.

Horas después, sus padres, que regentan un bar en Xestosa, pusieron en conocimiento de la Guardia Civil de Toén la desaparición de su hija. Fue entonces cuando comenzó el operativo de búsqueda de Laura. Guardia Civil, Protección Civil, Policía Judicial, perros de rastreo del Servicio Cinológico, vecinos, amigos y familiares aunaron esfuerzos para dar con su paradero y "peinaron" las pistas, arroyos y las zonas de monte del municipio. El resultado fue el hallazgo del coche de la joven en una pista de la parroquia de Alongos, a varios kilómetros de su domicilio. El vehículo estaba bien aparcado, cerrado y en perfecto estado, y está siendo analizado por la policía.

Dos teléfonos móviles

El operativo se saldó también con el hallazgo de un teléfono móvil, sin batería ni tarjeta, en las inmediaciones del colegio de Toén, a unos cinco kilómetros de la casa de Laura. En su domicilio fue hallado otro terminal en el que se encontraron "mensajes amenazantes" cuyo contenido no ha trascendido.

Las zódiac de Protección Civil de Ourense se echaban ayer al río para continuar la búsqueda de Laura, operación dirigida por Amadeo Pérez. Así daban el relevo a los Geas, agotados tras cuatro jornadas rastreando las aguas operación dirigida por Amadeo Pérez. "Nos movimos en una distancia de unos cuatro kilómetros, entre Alongos y el balneario de Laias, pero de momento, nada de nada", lamentaba ayer a última hora. El operativo continuaba durante toda la noche, aunque al cierre de esta edición no había novedades.

Los familiares de Laura Alonso Pérez, presentes en todo momento en las zonas en las que se busca a su hija, declinaron hacer declaraciones en la jornada de ayer. Sus rostros reflejan una enorme tristeza, desesperación e impotencia, al igual que los de sus amigos, que tampoco quisieron aportar información.

La Guardia Civil tomó declaración, entre otros, a un ex novio de Laura Alonso Pérez. Según ha podido saber FARO, la joven interpuso una denuncia contra él en 2007 en la Comandancia de la Guardia Civil por un presunto delito de malos tratos, una querella que fue retirada por la propia Laura Alonso Pérez, de la que se ha confirmado también que estaba a tratamiento psiquiátrico. La vecina de Xestosa estudia Formación Profesional en el IES Portobello, centro educativo ubicado en el barrio ourensano de As Lagoas.

Sus amigos no escatiman esfuerzos con el fin de poder volver a ver a Laura y han creado un "tuenti" (red social virtual dirigida a la población española) en el que piden a los lectores que envíen mensajes privados, ya que cualquier dato que aporten sobre su amiga será de gran ayuda para encontrarla.

La página de internet relata que la noche de su desaparición Laura llevaba puesto un vestido de color azul, unas sandalias negras y una chaqueta también negra. Añaden que es una chica de pelo corto, liso y moreno, y que mide 1,60 metros y pesa 48 kilos. Sus ojos son de un color verde miel.

Aseguran en el "tuenti" que toda la gente del entorno de la joven está haciendo lo imposible por encontrar alguna pista que les lleve a su paradero. "Laura, confiamos en que estés pronto con nosotros. Te echamos de menos", recoge el documento.