Los dos empresarios contra los que las tres hermanas alicantinas dirigen la demanda para reclamar parte de la herencia millonaria de la que considera familia biológica directa, pertenecen a una conocida familia de armadores y comerciantes con varios establecimientos vinculados al mundo de la pesca, según explicó ayer el abogado Fernando Osuna, que de momento mantiene total mutismo sobre la identidad de los afectados.

El hijo nacido fuera del matrimonio habría sido prohijado en plena Guerra Civil por un hermano del padre biológico y su mujer para cubrir la situación, según los datos que maneja el letrado. Inicialmente las tres hermanas alicantinas intentaron negociar de forma extrajudicial con la que consideran su familia biológica, si bien en este momento "las negociaciones están rotas", según el letrado, por lo que han acudido al juzgado.