En los recortes número 11 y 15 de la camiseta que llevaba la niña el día de los hechos "hubo contaminación" en laboratorio, con las tijeras utilizadas para cortar el preservativo de la persona implicada en otro caso y cuyo perfil genético coincidía con los restos encontrados en la ropa de Asunta. Esa persona, que también declaró por videoconferencia en este juicio, estuvo imputada y actualmente exculpada. Los profesores de la Universidad de A Coruña, doctores en Biología y Química, que realizaron un informe sobre el tema del semen en la camiseta a petición de la acusación popular, explicaron que "es normal" que se produzca contaminación en laboratorio, "no en el análisis, sino en la manipulación de la muestra". Expresaron que en Biología "la certeza absoluta no existe", pero quisieron dejar constancia de la elevada probabilidad de que esa contaminación se produjese.

Los dos peritos explicaron que la contaminación se produciría en los laboratorios de la Guardia Civil de Madrid, según su teoría. Recordaron que se empleó para ambas pruebas el mismo material y fueron realizadas por la misma persona, al tiempo que incidieron en que la muestra de semen que disponía el laboratorio era "altamente contaminante". Expresaron también que los restos recogidos en la piel de la niña en contacto con esta zona de la camiseta no registran semen y apuntaron que otro recorte de la camiseta se contaminó con ADN de uno de los investigadores. "Es imposible dirigir dos microgotas a dos zonas de la camiseta. Cualquier varón tiene conocimiento de ello sin ningún problema", expresó uno de los peritos. Que no haya restos de semen en las pruebas que se analizaron entre el primer caso y el de Asunta se explicaría por tratarse de "una contaminación puntual" y no "sistemática".