Un matrimonio octogenario y su hija fallecieron ayer en el incendio de la vivienda en la que residían en Vilalba. Los bomberos rescataron tres cadáveres calcinados, ninguno en los dormitorios por lo que se sospecha que intentaban huir de las llamas, y ahora la autopsia determinará si se trata, como parece, de Manuel Pico, de 82 años; Dolores Prieto, de 78 y su única hija, Azucena, de 53 años.

Una vecina alertó al 112 poco antes de las nueve de la mañana, porque vio salir humo de las ventanas del inmueble, "una vivienda unifamiliar, bastante grande". Cuando los bomberos llegaron al lugar indicado, "el incendio ya se había desarrollado" y el interior de la vivienda "estaba totalmente en ruinas", precisó Ignacio Martínez, jefe de Bomberos.

En cuanto a los ocupantes de la vivienda, señaló que la elevada temperatura que se registró en el interior de la casa, que "llegó a los 1.000 grados", hizo que los tres cadáveres encontrados estén "completamente calcinados", de modo que los servicios de emergencias sólo encontraron "algunos restos óseos entre los escombros".

La principal hipótesis que barajan los investigadores sobre el origen del incendio es que las llamas prendieron durante la noche en la chimenea de la cocina de leña, que los ocupantes de la casa pudieron haber dejado encendida por el intenso frío que hacía, y que de allí se propagase a la estructura de madera del tejado, que se colapsó sobre la vivienda.

En cualquier caso, especialistas del Equipo de Investigación de Incendios Estructurales de la Guardia Civil de A Coruña se desplazarán en las próximas horas hasta San Simón da Costa para investigar las causas del incendio. Fuentes del instituto armado confirmaron que todo el perímetro de la vivienda calcinada ha quedado acordonado y será custodiado por varios agentes hasta que finalice el traslado de las víctimas y los trabajos de investigación para esclarecer las causas del fuego. Está previsto que los especialistas en investigación de Incendios Estructurales lleguen hoy a Vilalba, aunque ya están trabajando en el lugar agentes de Policía Científica de la Comandancia de Lugo para tratar de identificar a los tres cadáveres hallados.

El alcalde de la localidad, Gerardo Criado, confirmó que "presumiblemente" las tres personas que vivían en la casa fallecieron en el incendio. El regidor local precisó que la hija del matrimonio -viuda desde hace años- tiene cinco hijas, pero ninguna residía en la vivienda.

Los bomberos trabajaron durante más de una hora para extinguir las llamas, que finalmente acabaron por calcinar toda la vivienda.