La camarera de 43 años que murió tras recibir varias puñaladas en un bar de Ferrol el pasado mes de abril falleció desangrada, según ha explicado hoy el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, tras conocer la autopsia.
Villanueva, que ha asistido en A Coruña a la celebración del Día de la Policía Local, ha confirmado sobre este caso que "lo que indica la autopsia" es que la mujer murió desangrada, ha detallado a los periodistas.
"Las investigaciones por parte de la policía llevaron al sospechoso a prisión. Si hay alguna prueba más que pueda aportar la policía se entregará en el juzgado, ahora lo que toca son decisiones judiciales", ha continuado.
El juzgado de instrucción número dos de Ferrol dictaminó prisión comunicada sin fianza por un delito de homicidio o asesinato, pendiente de calificación, para el único detenido sospechoso de la muerte.
Se trata de V.T.N., de 31 años, natural de Narón y vecino de Ferrol, que es el gerente otro establecimiento situado a medio kilómetro de la cafetería de la que era cliente habitual, en el mismo barrio de Caranza, y en la que trabajaba la víctima.
