El narcotraficante arousano Laureano Oubiña Piñeiro afirmó ayer en un programa de televisión que "si me he pasado 22 años en prisión fue por comprar el pazo de Baión". El cambadés concedió una entrevista en el programa que dirige Ana Rosa Quintana en Telecinco. Acompañado por su abogado, Enrique Trebolle, Oubiña se enfrentó a las preguntas, entre otros, del magistrado José Antonio Vázquez Taín.

Oubiña intentó en todo momento dejar claras dos ideas, que él solo traficó con tabaco y hachís; y que se considera una víctima del sistema judicial. En su opinión, si cumplió "a pulso" tantos años en la cárcel fue por dos motivos: el hecho de haber adquirido la finca de Baión y su "chulería" durante el juicio de la operación Nécora, en la que se hizo famoso por sus contestaciones altaneras a las preguntas del fiscal. "Esa chulería, de esas aguas vienen estos lodos", espetó.

Sobre ese comportamiento, Oubiña se justificó recordando que se pasó "cuatro años y medio en prisión preventiva por algo de lo que era inocente, y el fiscal lo sabía". "Cuando iba a cumplir los cuatro años de preventiva, 15 minutos antes de las 12 de la noche llegó la renovación por seis meses más. Así que cumplí en prisión preventiva lo máximo que se podía cumplir. ¿Cómo se lo tomaría usted?", dijo.

Oubiña dijo en alguna ocasión que se arrepentía de haber traficado con hachís, pero no por los daños causados por la droga. "Que yo sepa el hachís no ha matado a nadie, como matan el alcohol o el tabaco". Eso sí, afirmó que "el hachís casi me cuesta la separación de mi segunda mujer". Al parecer, Esther Lago era quien llevaba las cuentas familiares, y llegó un momento en que no le cuadraban las ganancias.

En cuanto a las manifestaciones de las madres contra la droga delante de su pazo, Oubiña manifestó que "ellas fueron ahí porque el pazo de Baión era muy jugoso, pero ellas sabían perfectamente que no traficaba con drogas duras".